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Troglio pone en alto a Saprissa, Alajuelense y las canchas de Costa Rica

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El entrenador argentino del Olimpia de Honduras, Pedro Troglio, brindó una amplia entrevista al sitio web Infobae y entre los temas que tocó se refirió al fútbol de Costa Rica haciendo referencia a Saprissa y Alajuelense. 

También resaltó las buenas canchas que hay en el balompié tico. 

Aquí parte de la entrevista 

¿Por qué te fuiste a Honduras?

Porque cuando terminé con Gimnasia, que perdimos la final de la Copa Argentina, me acuerdo que vinieron de Emiratos Árabes. Había cuatro técnicos más y yo en la lista. Y la persona que me quería llevar me preguntó cuántos títulos había ganado. Le dije que dos, uno con Gimnasia en la ‘B’ y uno con Cerro Porteño en Paraguay. “Ah, pero salí cuatro veces su subcampeón con Gimnasia”, le digo, como diciéndole que le pelee a Boca y River. Y me dijeron “claro, pero allá buscan que salgas campeón”. Entonces me di cuenta que tenía que buscar equipos grandes de afuera que estén necesitados. Ahí me llamaron de acá, de Olimpia, que hacía ocho temporadas que no salía campeón y es el más grande del país. Y pensé que era el momento de enriquecer el currículum con algún equipo que quiera salir campeón. Me vine y la verdad que no me arrepiento para nada, hay otra vida después de Argentina. Algunos creen “uh, ¿qué hace en Honduras?”. Y quedate tranquilo que este club es mucho mejor en organización que muchos equipos de Argentina.

Hay mucho prejuicio con el nivel del fútbol en Centroamérica...

A ver, acá no capaz no vas a encontrar el nivel de Boca o River, pero hay equipos que están al nivel de muchos otros en la Argentina. Te agarran un Deportivo Saprissa o Liga Deportiva Alajuelense, que son de Costa Rica, o mismo nosotros con Olimpia, y le peleamos a cualquier equipo del fútbol argentino. Hoy las canchas en Costa Rica están bárbaras y el hecho de competir contra México y Estados Unidos también te potencia. Tigres de México llegó a la final del Mundial de Clubes eliminando al Palmeiras. Nosotros no estamos a ese nivel pero compitiendo con ellos nos emparejamos, como cuando los mexicanos empezaron a jugar la Copa Libertadores o la Copa América y se fortalecieron. Después hay muy buena organización. Yo no hubo un día que no haya cobrado mi sueldo después del día 5 de cada mes. En la pandemia cobré todo y veía que en Argentina no le pagaban a nadie. Creemos que somos un fenómenos en todo y no es así. Somos buenos, seguramente, pero hay otros lugares en los que también se está muy bien.

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¿Qué debe hacer un DT antes de llegar a un fútbol desconocido?

Me bajé los últimos seis partidos del equipo, me los miré todos muchas veces, los desglosamos y empezamos a mirar la cara de los jugadores, a aprendernos los nombres y apellidos. Yo para eso tengo facilidad. Me acuerdo el primer día que llegué me crucé al 9 de ese momento, Jorge Benguche, que ahora se fue al Boavista, y le dije “hola, Jorge”. Se me quedó mirando como diciendo este sabe el nombre de todos. Después en algunos casos consultamos un software que te ayuda a ver individualmente los jugadores, entonces esos seis, siete u ocho que te impactaron los volvés a mirar de forma individual para llegar con una idea. Mirás un poco el campeonato, los equipos contrarios, averiguás quiénes son los mejores y los peores. Yo igualmente tuve 20 días pero te puede pasar que te llamen hoy y te digan “tenés que venir mañana”, y caés con una mano atrás y otra adelante. Después todo eso lo hacés estando en el club.

¿Con qué clase de jugadores te encontraste?

Acá hay jugadores físicamente muy dotados, porque se alimentan con frijoles, huevo y panceta todas las mañanas. El miércoles pasado fuimos a jugar con sensación térmica 41° a las 15:00, después de ocho horas de viaje y de haber jugado el clásico el domingo anterior, y vos los ves que se la bancan. Es verdad que nos costó el calor, pero después estuvimos ocho horas más para volver y al otro día entrenamos a la tarde. Es decir, encontré jugadores físicamente dotados y técnicamente buenos. Ese jugador moreno, rápido, buena técnica... A lo mejor, lo único malo, son las condiciones de los campos de juego, sacando dos o tres canchas, las condiciones del piso no son buenas y algunos equipos te complican por esa vía.

¿Podías presagiar este presente tan exitoso cuando no eras entrenador o recién dabas tus primeros pasos?

No, no me lo imaginaba para nada. No me olvido más: la primera charla que doy como DT cuando llego a Mendoza, que me habían dado una sala del hotel, la preparé previamente. Me anotaba lo que iba decir. Hoy me paro adelante de un grupo y digo lo que me va saliendo, lo me que venga a la mente. Ahí te das cuenta que uno piensa que porque jugó al fútbol tiene experiencia para dirigir. Y al empezar como entrenador lo hacés totalmente virgen, es todo nuevo. Con el tiempo vas mejorando y puliendo algunas cositas que no estaban buenas, aunque también te seguís equivocando.

¿Era menos complejo ser entrenador cuando empezaste?

Sí, pero, a ver... ¿sabés que tenía más importancia en el fútbol cuando yo empecé? Hay algo que no se paga: la llegada del entrenador al jugador, el cara cara, el transmitirle una idea futbolística y escucharlo cuando tiene algún problema. Hoy nos hemos ido al extremo con el tema de la tecnología. La tecnología es fantástica, sobre todo la edición de videos, pero ahora creemos que el que tiene un drone sabe de fútbol. Y para mí saber el fútbol es otra cosa. Lógicamente que me tuve que ir aggiornando, me compré el drone, el GPS, porque sino te tildan de antiguo, como si lo antiguo fuera malo. Pero... ¿por qué todavía siguen nombrando a maestros como Bilardo, Menotti o Griguol? Ellos no tenían estas herramientas. Por eso te digo que hay una confusión con el fútbol de hoy. Para mi saber de fútbol es trabajar, tener un mensaje claro, llegarle el jugador con las palabras justas y estar encima de ellos.

¿Cuáles son tus planes a futuro?

Mi plan a futuro es dirigir el próximo entrenamiento, ya no tengo planes, vivo el presente. Me gusta dirigir. Veremos que me va preparando el destino y los resultados. A lo mejor a nivel familiar, si sigo acá, los dos hijos más chiquitos míos quiero que vengan. Mis hijos grandes hacen su vida pero los chiquitos si tengo pensado traerlos acá conmigo.

¿Y volverías a trabajar en el fútbol argentino o ya preferís evitar ese nivel de presión?

Volvería porque también me gusta el fútbol argentino pero no a Gimnasia. Iría a cualquier equipo pero no a Gimnasia, ya es un capítulo cerrado.

¿Por qué?

Porque yo le dado mucho al club y siempre he ido en situaciones difíciles. Nunca he ido estando el club bien, siempre me tocó estar con el club mal y me he acomodado como he podido, y ahí hemos conseguido buenos resultados. Pero a la larga siempre te vas mal herido, y vas perdiendo el cariño de alguna gente. Porque cuando vos te exponés tanto, no te traen los refuerzos, perdés tres partidos y te putean a vos, siempre te vas con problemas. Creo que yo ya hice muy buenas cosas en Gimnasia como para tirarlas a la basura.

Fuente: Infobae