Tras renunciar a su puesto como entrenador del Hertha Berlín el pasado 11 de febrero, después de solo 76 días ocupando el puesto, Jürgen Klinsmann volvió esta semana a la plena actualidad con el informe que publicó el diario alemán Sport Bild, en que Klinsmann cargaba duramente contra la gestión del club.
“Es absolutamente necesario despedir a los directivos. Todos los buenos fichajes solo se convertirán en jugadores normales bajo su control, porque solo hay una regla que funciona en el fútbol: nunca eres mejor que el universo en el que evolucionas”, era una de las reflexiones y acusaciones del exdelantero alemán sobre los dirigentes del club berlinés, en un informe de 22 páginas, en que también afirma que la entidad tiene “una cultura de la mentira”.
Michael Preetz, director deportivo del Hertha, respondió a estas palabras y lamentó la postura de Klinsmann: “Estamos profundamente conmocionados al escuchar estas acusaciones hechas por nuestro ex entrenador. Puedo soportar este tipo de críticas, pero repudio fuertemente estos ataques repugnantes e indignantes contra nosotros. También pediría que se entienda que no entrenamos a abordar cada una de las acusaciones”. Para acabar con el tema, Preetz afirmó que no descartan emprender acciones legales y que Klinsmann “pretende justificar su renuncia con acusaciones absurdas”.
Desde la marcha de Klinsmann, el Hertha ha ganado un partido, en el debut del que era su ayudante, Alexander Nouri en el banquillo en el campo del colista, el Paderborn (1-2) y cayó goleado en casa contra el Colonia (0-5) el pasado fin de semana. Actualmente ocupa la 14º posición en la Bundesliga, a 6 puntos del puesto de promoción de descenso.
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