El equipo del Napoli resurgió y este sábado recuperó su antiguo esplendor como por arte de magia, al vencer a Inter como local por 3-1 y recuperando el liderato de la clasificación de la Serie A del fútbol italiano.
Sin embargo, la victoria tuvo un alto precio, ya que a la larga lista de lesionados (Hojlund, Lobotka, Rrahmani, Meret y Lukaku) se unió este sábado Kevin De Bruyne, quien también estará unos cuantos días fuera del campo por una lesión muscular.
Napoli e Inter se jugaban la punta de la Serie A del calcio en el partido estelar de la octava fecha del campeonato.
Y el ganador -y ahora único dueño de la cima de la tabla- fue el equipo del Sur.
El belga Kevin De Bruyne (33'), de penal, el escocés Scott Mc Tominay (54') y el camerunés André Zambo Anguissa (66') anotaron los goles del dueño de casa, mientras que el turco Hakan Calhanoglu (59'), también desde los 12 pasos, marcó el 1-2 parcial para el equipo "nerazurro", que se fue con las manos vacías y también con un enojo descomunal.
Napoli recuperó su forma técnica y atlética, así como el espíritu competitivo que había perdido en las derrotas contra el Torino y el PSV, que le propinó una goleada estrepitosa en la Champions League esta semana.
En la primera media hora, ninguno de los dos equipos encontró la manera de superarse, y la única ocasión llegó tras un error de Spinazzola que dejó a Lautaro Martínez en una posición ideal para rematar. El disparo del argentino, sin embargo, fue bloqueado por la salida de Milinkovic-Savic.
El Nápoles se adelantó con un penal de De Bruyne y las consecuencias de ese gol marcaron claramente el resultado del partido. En la segunda mitad, el partido cobró ritmo y se volvió frenético. El Inter comenzó con un ritmo vertiginoso, pero el Nápoles encontró el segundo gol. Sin embargo, la ventaja de dos goles solo duró unos cinco minutos. En el minuto 14, Lautaro Martínez cabeceó un centro desde la izquierda, que dio en el brazo extendido de Buongiorno. El VAR forzó el penal. Pero tras eso y cuando se esperaba la arremetida de Inter, Nápoli encontró su ritmo mágicamente y amplió ventajas sentenciando el pleito.

