El comienzo de la aventura del hermano menor de Jude Bellingham, Jobe, no ha comenzado de la mejor forma y tras el primer partido de la Bundesliga llegó el escándalo.
Jobe dejó Inglaterra tras conseguir el ascenso a la Premier League con el Sunderland para continuar su crecimiento en Alemania, específicamente con el Borussia Dortmund a raíz del crecimiento de su hermano Jude.
No obstante, el primer juego de la temporada fue un empate 3-3 ante el St. Pauli en el que fue sustituido en el descanso. Esta decisión de Niko Kovac no gustó nada en el círculo más cerca de los Bellingham, en concreto a su padre Mark y su madre Denise, quienes según Sky Sports Alemania bajaron a la zona de vestuarios para obtener respuestas.
El medio de comunicación informa que Mark Bellingham se acercó a la zona de los jugadores, donde se le vio discutiendo de forma intensa con Sebastian Kehl, director deportivo del equipo y gran responsable de la llegada de Jobe. Una “visita” que no agradó en la cúpula del Dortmund.
Posteriormente, Sebastian Kehl fue contundente en que estos hechos no se volverían a dar, sin nombrar a nadie. “Todos estamos decepcionados con el resultado de ayer. Sin embargo, el área activa está y seguirá reservada para jugadores, entrenadores y directiva, no para familias y asesores. Eso no volverá a suceder. Hemos informado claramente a todos los involucrados”, declaró Kehl.
Antes de este problema con los Bellingham era habitual ver a los familiares y representantes de jugadores en las salas cercanas al vestuario tras los partidos, no obstante, ahora el club será más estricto.
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