Ni el desgaste físico tras los tiempos extra frente al Barcelona en Champions ni el fuerte diluvio que cayó este domingo en Turín fueron suficientes para frenar al Inter de Milán, que se impuso 2-0 al Torino y alcanzó en puntos al líder de la Serie A, el Nápoles.
Lejos de distraerse con la final de la Champions League ante el PSG, programada para el próximo 31 de mayo, el equipo dirigido por Simone Inzaghi sacó adelante un partido complicado, incluso con una alineación completamente diferente a la que jugó el martes pasado.
Goles bajo el agua
El encuentro fue interrumpido momentáneamente por las intensas lluvias que azotaron Turín, lo que provocó que el descanso se extendiera media hora. Sin embargo, el Inter fue contundente. Nicola Zalewski abrió el marcador al minuto 14, y Kristjan Asllani amplió la ventaja desde el punto penal al 49’.
Con esta victoria, los ‘Nerazzurri’ llegaron a 77 puntos, los mismos que el Nápoles, que más tarde recibe al Génova. El cierre del campeonato será de alta tensión, con dos jornadas restantes que definirán el título de la Serie A.
Todo puede decidirse en un desempate
El Inter enfrentará a la Lazio y al Como, mientras que el Nápoles se medirá ante el Parma y el Cagliari. En caso de que ambos equipos terminen empatados en puntos, el campeonato se definirá en un partido de desempate, ya que en Italia no se usa la diferencia de goles como criterio para definir al campeón, como ocurre en otras ligas europeas.
Con el sueño de la Champions a la vista y el título local al alcance, el Inter demuestra que no baja el ritmo ni bajo la tormenta.