El Real Madrid sufrió una de sus peores derrotas en la Champions League al ser totalmente superado por el Arsenal en la ida de los cuartos de final.
Para los jugadores y cuerpo técnico del conjunto blanco es posible una remontada, pero lo cierto es que para muchos es imposible pensar en que le pueden dar la vuelta a la serie.
Así lo ve el periodista nicaragüense, Edgar Tijerino, quien explicó en su análisis ha sentenciado al Real Madrid luego de observar la exhibición del Arsenal del español Mikel Arteta.
RICE, HIERE Y MATA
Arsenal golea al Madrid 3-0
¿Y ahora, qué esperamos?...Por lo que vimos, olvidemos una remontada del Madrid. Con ese 0-3 encima, con el cuello, la espalda y las rodillas dobladas, eso parece tan improbable como cambiar de sitio a empujones el Arco del Triunfo, o “bucear” entre una montaña de escombros en busca del tesoro de Faria en la isla de Montecristo. Cierto, se lo hizo el Liverpool en la Champions 2019 al Barcelona de Messi, exactamente volteando un 0-3, pero, en aquella ocasión, el Liverpool se vio mejor aún perdiendo así el primer juego, y en la vuelta en Anfield, el 4-0 roba-botín, fue tan claro como un amanecer en la playa en tiempo de verano. Pienso que la posibilidad de remontar debe ser descartada, aunque Lucas Vásquez diga que “si hay un equipo capaz de eso, somos nosotros”. No creo que lo crea. El Madrid deambulando entre sangre, sudor y lágrimas, terminó deshilachado, sin reconocerse a sí mismo. Como nadie lo imaginó antes de sonar el silbato.
El 0-0 del primer tiempo, con dos opciones de Mbappé y una de Vinicius, sin poder apretar el gatillo, con dos formidables intervenciones de Courtois sobre corners endiablados de Saka, aunque con más flexibilidad y claridad del Arsenal, hizo pensar en un segundo tiempo más eléctrico en la búsqueda de la victoria. Podía ser, pero la primera estocada de Declan Rice en el minuto 58, golpeó en la mandíbula con repercusión en la cabeza al Real Madrid. Una belleza de disparo. Messi y Cristiano lo hubieran ovacionado. Una preciosa curva caprichosa a un lado de la barrera y la veloz y certera travesía del balón casi raspando el poste derecho. En el 70 otro tiro libre desde fuera del área pero ahora más hacia el centro. ¿Quién lo tira? ¿Por qué no Rice otra vez después de lo que hizo? Imaginar otro disparo de catálogo, parecía exagerado, pero Rice clavó la pelota en la escuadra alta derecha casi tangente a poste y travesaño. Coiurtois no lo podía creer, y nosotros tampoco.
El tercer gol en el 75 es otra obra de arte. Una limpia penetración por la izquierda con tres toques, pase rápido hacia el centro en la frontera del área, y remate de primera con rosca y botín zurdo de Mikel Merino, junto al poste izquierdo. Nada que discutir con el 3-0 en contra. La diferencia pudo ser mayor, pero tres grandes atajadas de Courtois y par de rechaces en la propia raya, evitaron agrandar la catástrofe. Ninguno de los astros del Madrid consiguió mostrarse, y como equipo, la impresión fue peor…Se sentía cierto temor en el madridismo pese a que el Arsenal no se vio bien contra el Everton, pero lo frustrante que fue la derrota del Madrid con el Valencia, obligaba considerar el partido en Anfield como una difícil ecuación algebraica. Y que resultó: tememos que nos maten, pero peor aún es que nos destruyan. Y eso pareció el Madrid, un equipo destrozado.
GOL DE RICE CON COMBA
Nota: Edgar Tijerino es un reconocido periodista deportivo nicaragüense