El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, proclamó una "emergencia nacional para la población", anunciando medidas destinadas a apoyar económicamente la tasa de natalidad en un intento de invertir el rápido descenso demográfico del país.
"La crisis demográfica causada por la tasa de natalidad extremadamente baja es el problema más inmediato y crítico que enfrenta Corea del Sur", dijo el presidente, y agregó que la disminución de la población, en su gravedad actual, "genera preocupación por la supervivencia misma de Corea del Sur".
La "respuesta de emergencia" prevista por el Jefe de Estado incluirá la creación de un departamento de estrategia demográfica, como ya se anticipó el mes pasado. El jefe del nuevo departamento también desempeñará el cargo de viceprimer ministro de Asuntos Sociales, cargo actualmente atribuido al ministro de Educación. Yoon también nombrará un nuevo secretario presidencial encargado de combatir la tasa de natalidad.
Medidas concretas incluirá un aumento del permiso parental para el cuidado de los hijos hasta que los niños cumplan 12 años y la duplicación del permiso parental para los padres hasta los 20 días. Se aumentarán las asignaciones mínimas para los padres en permiso parental, lo que también incluirá subvenciones a las empresas para ayudarlas a hacer frente a la carga económica asociada.
Yoon también se comprometió a crear un sistema de atención pública integral para niños de hasta 11 años para el final de su mandato, que proporcione educación y atención médica públicas gratuitas hasta los cinco años y la expansión de los programas extraescolares. Otra intervención se referirá al aumento de la mano de obra en el ámbito de la atención infantil, centrándose también en los ciudadanos extranjeros.
Tasa total de fertilidad de Corea del Sur –el número medio de hijos por mujer en ese país– cayó aún más durante 2023 hasta apenas 0,72, muy por debajo del valor de 2,1, necesario para garantizar el equilibrio de la estructura demográfica de una sociedad. Así lo certifican los datos publicados el pasado mes de febrero por el gobierno surcoreano. Corea del Sur se confirma así como el único país miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con una tasa de fertilidad total inferior a 1.
Como ocurre con varios otros países, la crisis de natalidad que enfrenta Corea del Sur se ha agravado aún más debido a la Pandemia de Covid-19, y según los últimos datos del gobierno, los nuevos nacimientos el año pasado ascendieron a alrededor de 230 mil, con una caída del 7,7 por ciento en comparación con 2022. Mientras tanto, la edad promedio de las mujeres coreanas que dieron a luz aumentó el año pasado a 33,6 años.
Desde 2006, el Gobierno surcoreano intenta luchar contra la natalidad con planes quinquenales. Entre 2006 y 2021, el país ha destinado 280 millones de wones (210 millones de dólares) para apoyar la natalidad y la crianza de los hijos, pero sin gestionar para revertir la tendencia.