El miércoles el PSG, con el portero tico Keylor Navas en banca, se clasificó para los cuartos de final de la Copa de Francia tras superar por 3-1 al Brest.
El triunfo del conjunto parisino pudo tener un peaje muy caro para los capitalinos en forma de lesión de su máximo referente. Y es que Kylian Mbappé, autor del primer tanto del partido, fue el protagonista secundario de una criminal entrada de Lilian Brassier.
Corría el minuto 69 cuando Mbappé, con un rápido giro en el círculo central, se perfilaba para una galopada hacia la portería contraria. Viendo esto, el zaguero del Brest entró con todo y cortó la acción de manera terrorífica, propinando un brutal pisotón al astro galo en su talón de Aquiles y tobillo.
Al producirse el mismo en pleno giro del atacante del PSG, el tobillo e incluso la rodilla de Mbappé sufrieron una torsión casi antinatural que hicieron temer lo peor. Sin embargo, de forma milagrosa, el '7' pudo continuar sobre el terreno de juego. Un hecho del que no pudo presumir el autor de la escalofriante entrada.
Y es que Brassier ser marchó del partido al ver la tarjeta roja. Eso sí, para sorpresa de propios y extraños, el colegiado del duelo no le mostró la roja directa, sino que le enseñó la segunda cartulina amarilla (había visto la primera en el minuto 60), terminando así la participación de un Brassier que estuvo muy cerca de mandar al hospital al ídolo francés.