En la prensa deportiva francés, y en gran parte del mundo, el tema principal tiene que ver con cuál será el futuro de Kylian Mbappé.
El PSG tiene una estrategia clara con Mbappé que no es otra que no contar con él, de hacerle entrenar en París con los descartes.
Una estrategia para hacerle ver que o renueva o se va este verano. El jugador también está jugando sus cartas y su objetivo no es otro que ganarse a la afición parisina.
Así, Mbappé no tiene problemas en bajarse del auto cuando sale de los entrenamientos para atender a todos los aficionados que están a las puertas de donde entrena el PSG.
Una actitud sorprendente porque antes de que se iniciara todo este lío entre el jugador y el club, Mbappé raramente se bajaba del coche para atender a los aficionados.
Un cambio de actitud que no es gratuito. Los aficionados del PSG, especialmente los ultras, no perdonan a sus jugadores que no se impliquen con el club y si no, que se lo pregunten a Messi que fue silbado por los seguidores del PSG. Eso es lo que quiere evitar Mbappé, recibir una bronca por parte de la grada. De ahí, que esté cuidando como nunca a los aficionados y así ahorrarse una posible bronca. Porque, a día de hoy, el jugador sigue firme en su idea de seguir en el PSG hasta 2024.
Quedará esperar. De momento el equipo parisino sigue con su gira en Asia.
Fuente: Mundo Deportivo