La historia de Rakitic y el Barcelona se resquebrajó esta temporada. La gestión de su papel en el club por parte del ex técnico Ernesto Valverde durante este primer tramo de temporada sentó muy mal al croata, apartado prácticamente del equipo sin motivo aparente.
Su salida parecía cuestión de tiempo y desde la dirección del club se contemplaba su marcha e incluso su inclusión en alguno de los traspaso que se contemplaron.
Durante el transcurso de esta temporada llegó a manifestar que se sentía «triste» por todo lo que le estaba pasando en el vestuario debido a la falta de minutos: "¿Cómo puede disfrutar uno? Jugando al fútbol. Y es como yo digo muchas veces, ¿cómo se siente mi hija pequeña cuando le quitas un juguete? Se siente triste. Pues yo me siento igual, me han quitado la pelota".
Con la llegada de Quique Setién y el cierre del mercado parece que su situación ha cambiado levemente y está volviendo a tener protagonismo en las filas culés aunque el croata no olvida todo lo que ha pasado estos meses.
Tras el triunfo ante el Levante de este domingo, Rakitic se desahogó al ser cuestionado por una hipotética salidas este pasado enero: "Ha habido cosas que no me han gustado. Lo sabe la gente que toma decisiones y lo sabemos nosotros. Aquí no estamos para reír ni para hacer bromas. Lo mejor para el club tiene que ser lo mejor para nosotros. Intenté aceptar las cosas y ahora quiero disfrutar".
El balcánico era duro con la gestión del club en torno a él, lo expuesto que estuvo a una salida e incluso lo ajeno a lo deportivo que llegó a estar durante la presente temporada, pese a ello quiere «pasar página» cuanto antes. «Trabajar de la mejor manera posible. Y quiero que mis compañeros, técnicos y afición sepan que estoy al cien por cien. Varias cositas no me gustaron pero no es el momento de hablar de esto«, sentenciaba Rakitic que parece perdonar pero no olvida.