El volante japonés, Keisuke Honda ya tiene un nuevo equipo. Continuará su carrera en Brasil con el Botafogo.
Honda tocó techo en el Milan, a donde llegó procedente del CSKA de Moscú. Allí estuvo tres temporadas y media, y tras pasar la última prácticamente inédito decidió marcharse.
Su destino no pudo ser más sorprendente. Se marchó a Pachuca, a la Liga MX. Fue recibido como a una estrella, y Honda cumplió, y acabado su contrato se fue a Australia.
En el Melbourne Victory estuvo el curso pasado, donde llegó a disputar 24 encuentros, en los que anotó ocho goles. De nuevo sin equipo, Honda decidió volver a Europa.
Pero segundas partes nunca fueron buenas, y el japonés retornó a la Eredivisie, donde se labró un nombre con el VVV Venlo. Recaló en el Vitesse, pero no resultó ser lo que esperaba.
Tras jugar solo 270 minutos en los cuatro partidos que disputó en los dos meses que estuvo en el club, el japonés anunció que dejaba el equipo. Y en este mercado de enero que está próximo a su cierre, Honda encontró un nuevo equipo.
Se trata de Botafogo, como se venía rumoreando desde hacía días. Allí jugará al menos hasta final de 2020 este trotamundos del Lejano Oriente.