Buscar en Google:

Un técnico argentino cuenta el drama que vive en Bolivia

Imagen

Pasaron 22 días de aquel 20 de octubre en el que los bolivianos se presentaron ante las urnas para elegir un nuevo presidente. Dieciocho desde que las organizaciones ciudadanas convocaron distintas huelgas por tiempo indeterminado tras las denuncias de fraude en los resultados que daban a Evo Morales como presidente reelecto.

Con el correr de los días comenzaron los enfrentamientos, las protestas y los cortes hasta que este domingo las Fuerzas Armadas y la policía le pidieron la renuncia al presidente, quien finalmente la aceptó tras 13 años en el poder.

“Sé que en Argentina se está hablando de golpe de Estado”, reconoce el entrenador argentino Cristian Díaz a Infobae. “Pero la realidad es que acá no había ninguna duda de que la gente se estaba manifestando de manera espontánea y de manera sentida. No había ningún interés”, agregó el técnico del Jorge Wilstermann, actual líder del campeonato boliviano.

 

“Bolvia TV dejó de emitir. El canal del Estado no existe más. Acá hubo fraude electoral. No fue ningún golpe de Estado. Estaría comprobado el fraude informático y la manipulación de votos. La OEA es la que dice que hubo fraude”, determinó el ex futbolista.

La situación política que atraviesa el país boliviano también golpea de lleno al fútbol local, el cual hace seis fechas que no se disputa. Producto de los cortes y manifestaciones, el entrenador, radicado en Cochabamba (482 km de Santa Cruz), asegura: “Tengo que desplazarme 15 kilómetros ida y vuelta en bicicleta para trabajar. Hay cortes pacíficos. El inconveniente es que la gente necesita trabajar y eso genera un poco de molestias, pero la verdad es que es todo muy tranquilo”.

“Acá hay supermercados grandes, y algo que han hecho es que, por ejemplo, había días que se liberaban las calles de los cortes para abastecer la ciudad en los supermercados y demás. La gente se propuso pelear por algo pero tratan de ayudar”, agregó.

Cristian Díaz explica a Infobae que afortunadamente continúan entrenando con normalidad. “Tuvimos que variar un poco los horarios y algunos días tuvimos que suspender porque la información que teníamos de lo que podía pasar no era buena, así que tuvimos que parar dos o tres entrenamientos durante todos estos días”.

Una situación distinta a la del resto, como por ejemplo los equipos de Santa Cruz: “Allá, por ejemplo, tengo entendido que como es una ciudad tipo Buenos Aires, los clubes estuvieron mucho más complicados para entrenar y juntar todo el plantel. En nuestro caso, a partir de las bicicletas y las distancias más cortas, pudimos entrenar”.

 

En cuanto al torneo de Primera División, el cual lidera su equipo el Jorge Wilstermann con 36 puntos, a tres unidades del Bolívar, su inmediato perseguidor, continúa detenido.

“Con la de este domingo se postergaron seis fechas y ahora el miércoles hay una reunión en donde tendrán que definir cómo continúa. Si todo se normaliza, el torneo tiene que continuar. Nos quedan 10 partidos por jugar”.

La competencia “iba a terminar el 11 de diciembre y lógicamente con esta situación habrá que reorganizarse nuevamente y competir pasada esa fecha”, considera Díaz, quien entiende que tras la presentación oficial de la carta de renuncia del presidente, y su posterior aprobación del Congreso, debería empezar a normalizase la situación social.