El fútbol inglés vivió este domingo una de las situaciones más surrealistas de su historia cuando el técnico argentino del Leeds, Marcelo Bielsa, ordenó a sus jugadores que se dejaran encajar un gol después de que un jugador de su equipo marcara un tanto con un jugador del equipo rival, el Aston Villa, tendido en el suelo lesionado.
El Leeds se jugaba el ascenso directo a la Premier League pero Marcelo Bielsa le dio más importancia al fair play.
El técnico argentino dio la orden de no impedir que Albert Adomah llegara al área desde el centro del campo y marcara el gol que igualaba el partido, aunque el defensa Pontus Jansson intentó impedir que el delantero del Aston Villa lo consiguiera, sin éxito.
La acción llegó en el minuto 71 del partido con el marcador a cero y con el Leeds United jugándose el ascenso directo a la Premier League cuando con un jugador del Aston Villa tendido en el centro del campo el centrocampista Adam Forshaw recogió un balón que un compañero pareció ceder a su rival y marcó, lo que provocó una gran tangana entre jugadores de ambos equipos.
El técnico argentino mandó a sus jugadores que se dejaran marcar el gol y una vez culminada la acción discutió con el técnico del Aston Villa, el ex jugador John Terry. El empate final (1-1) provocado por esta decisión de Bielsa impide a su equipo aspirar ya al ascenso autómatico y deberá jugar un play off. El Sheffield United se unió al Norwich en el ascenso a la máxima categoría.
