La DFB negó tendencias racistas y lamentó la salida del jugador de la "Mannschaft", con la que Özil jugó 92 partidos oficiales, anotó 23 goles y se consagró campeón mundial en Brasil 2014.
"Rechazamos con toda claridad que se vincule a la DFB con racismo”, planteó el organismo en un comunicado.
La nota indica que la DFB "se habría alegrado si Özil hubiera querido seguir formando parte del equipo y lamentó su retirada. Al mismo tiempo, expresó la voluntad de proseguir con "su exitosa labor de integración, movida por una profunda convicción”.
La fuerza de la diversidad
"La diversidad es una fortaleza, no solo en el fútbol. Por eso nuestro trabajo de integración en todos los niveles tiene una importancia central", agregó.
El organismo subrayó asimismo que desde las categorías inferiores a la selección absoluta, los jugadores y jugadoras con raíces extranjeras forman parte de la DFB. "Jugamos y convivimos con nuestras diversas raíces familiares, nuestras religiones y nuestras culturas", rezaba el escrito.
Özil presentó su renuncia el domingo, tras la polémica desatada por la publicación de una foto suya con el presidente de Turquía, Recept Tayyip Erdogan.
