El duelo entre Brasil y Bélgica por los cuartos de final de la Copa del Mundo el viernes, puso cara a cara a dos camisas número 9 con estilos diferentes. Gabriel Jesús ha sido alabado y apoyado por el comité técnico de la selección brasileña por su entrega y la importancia táctica, aunque todavía no ha marcado goles en el Mundial. Pero el belga Romelu Lukaku, más alto y más fuerte, es un típico centro delantero, finalizador en el área y ya ha anotado cuatro veces en Rusia.
Jesús y Lukaku se conocen bien, ya que son rivales en el fútbol inglés. La pasada temporada, el brasileño fue campeón con el Manchester City, anotando 13 goles en la Premier League. El belga en el United anotó 16 goles, exactamente la mitad del máximo goleador de la liga, el egipcio Mohamed Salah del Liverpool. En la Copa del Mundo, sin embargo, los números entre los 9 de Brasil y Bélgica están poco equilibrados.
De acuerdo a los datos de la FIFA, Jesús ha rematado cinco veces en el mundial pero no encontró la red en cuatro partidos. También dio la asistencia en el gol de Philippe Coutinho contra Costa Rica, además de haber cometido cinco faltas. Lukaku, que jugó un partido menos, marcó cuatro goles y remató ocho veces (cinco directo a la portería y tres desviados). No dio ninguna asistencia en la estadística oficial, pero su ‘pantalla’ en el tercer gol de Chadli frente a Japón, que dio el pase a los octavos de final, valió más que cualquier pase a gol. Es menos participativo en la defensa que Jesús, pero también cometió cinco faltas.
La inexperiencia también pesa contra el brasileño: Jesús tiene 21 años, cuatro menos que Lukaku. El belga debutó en mundiales en Brasil 2014, también a los 21, y marcó apenas un gol. El atleta revelado por el Palmeiras, sin embargo, niega estar sintiendo el peso de vestir una de las camisas más importantes del fútbol mundial. "Estoy muy tranquilo y sosegado, sé de mi responsabilidad, de mi capacidad, lo que me ha traído hasta aquí. Quiero trabajar quieto y ayudar al equipo de alguna manera", afirmó, en la zona mixta del Arena de Samara.
Importancia táctica del 'tractor' Jesús
Jesús no viene moviendo las redes, función principal de cualquier camiseta 9 en el mundo, pero es extremadamente eficiente en un aspecto valorado en los equipos de Tite: la recomposición defensiva. Con vigor físico y lectura táctica por encima de la media, Jesús es fundamental en el combate, tanto en presión alta y baja.
Tite reveló que pensó sacar a Gabriel Jesús en el partido contra México, pero cambió de idea tras conversar con su auxiliar Sylvinho, que jugó una década en Europa y que vive desde hace varios años en Italia. Es considerado el experto táctico de la comisión de selecciones en Brasil.
Él entonces invirtió la posición de Neymar y Jesús, dejando al camiseta 10 como centro delantero y Jesús con funciones más de marca. "Estaba el marcador 2-0 en el final, pero México todavía estaba en el juego, estoy seguro de eso. Hablamos, discutimos y decidimos que Gabriel podría contribuir en la recuperación por el lado izquierdo. Coutinho estaba sobrecargado, tenía una tarjeta... Gabriel Jesús es un tractor. Todos son muy importantes y estamos sacando lo mejor de cada uno de ellos", afirmó Sylvinho.
A pesar de ser el goleador de la "era-Tite" con diez anotaciones, el propio Gabriel Jesús admitió que "nunca fue un artillero" y que tiene más facilidad para actuar por los lados. "Creo que soy más punta que centro delantero. Me siento muy feliz de estar ayudando de alguna manera", dijo. "Siempre me voy a entregar al máximo para que el equipo gane, claro que el gol es importante, pero lo que importa es la victoria", añadió.
