El futbolista argentino Ángel Di María llegó a un acuerdo con la Fiscalía y la Abogacía del Estado de Madrid asumiendo un doble delito fiscal al defraudar 1,3 millones de euros en relación con sus ingresos por la explotación de los derechos de su imagen.
Así, el rosarino tendrá que pagar dos millones de euros y acepta la pena de un año de cárcel, seis meses por cada infracción, aunque no ingresará en prisión.
En noviembre pasado la fiscalía de Madrid denunció al argentino por haber defraudado un total de 1.298.989,56 euros entre 2012 y 2013, cuando vestía la camiseta del Real Madrid. El futbolista había diseñado una estructura societaria para evitar los pagos a Hacienda.
El Fideo cedió sus derechos de imagen a Sunpex Corporation Inc., una empresa radicada en Panamá que derivaba estos derechos a MIM y Polaris, sociedades que forman parte del conglomerado del representante Jorge Mendes en Irlanda.