El Deportivo Saprissa logró la clasificación matemática a la siguiente fase del campeonato nacional como ganador del grupo B, por encima del Puntarenas FC. Aún tiene chances matemáticas de pelear el liderato general que da acceso a la gran final, aunque siendo honestos esta opción se ve bastante lejana dado que el Herediano no ha aflojado en su andar del certamen.
Si no hubiera sido por el tibio inicio de torneo los morados estarían en este momento saboreando las mieles del liderato, sin embargo, ese frío arranque fue lo que permitió que se ensamblaran las piezas de forma correcta y que el equipo hoy en día luzca como serio aspirante al título.
Hace ocho días, tras el empate frente al Herediano se instaló cierto pesimismo en los aficionados, pues el equipo muestra un once inicial muy fuerte, pero a la hora de realizar permutas, el funcionamiento colectivo se resiente.
Los peajes de Guápiles y Sporting, lucían peligrosos pues se debía enfrentar estos compromisos sin los seleccionados y algunos jugadores que cumplían el ciclo de cinco tarjetas amarillas, y para cerrar este colofón la ausencia de Mariano Torres por distintas molestias. El saldo no pudo ser mejor, en ambas presentaciones se consiguieron los tres puntos y algunos muchachos aprovecharon su oportunidad y levantaron la mano para ser tomados en cuenta de cara a lo que se viene en el torneo.
Ecuanimidad en el análisis. Una semana atrás uno de los principales señalados fue Fabricio Alemán, puesto que su ingreso frente al Herediano no fue el mejor; desde diversos sectores se quiso matar al muchacho por su desafortunada participación, sin embargo, a la gente se le debe recordar que este canterano de sangre morada tiene 19 años, fue goleador U15, U17 y U20, aun tiene margen de mejora, pero hay que ser más comedido cuando se emiten criterios puesto que ayer fue el héroe de los morados. El hijo del conocido Super Ratón Allan Alemán, se fue de doblete y no solo brindó los tres puntos a los suyos, sino que se puso en la cabeza de los goleadores del equipo, jugando muchos menos minutos que los otros delanteros del equipo.
Dicho lo anterior hay que dejar claro que el aporte en el juego colectivo de Javon East y Luis Paradela es invaluable; los goles se le han secado a este último, incluso el día de ayer falla una ocasión clarísima debajo del marco, sin embargo, sus movimientos en cancha y su incansable sacrificio hace que su estadía en cancha sea vital. Los goles volverán y lo importante es que lo siga intentado y que en instancias finales afine la puntería.
Lo que se viene. Una vez conseguido el primer objetivo de la clasificación; se podrían utilizar los próximos compromisos para dar descanso a algunos jugadores claves (David Guzmán está inconmensurable) y para continuar el rodaje de otros muchachos que han dado buenas prestaciones en estos compromisos. Lamentablemente ayer salió lesionado Ricardo Blanco y aún se desconoce el alcance de su lesión. Su sustituto ha sido Ryan Bolaños a quien el sistema de 3-4-3 le favorece pues se puede prodigar en ataque de forma más tranquila sabiendo que tiene cubierta su espalda. Debe continuar trabajando para evitar esos despistes defensivos, pero al menos se ha convertido en una alternativa viable para el técnico Jeaustin Campos.
Todo apunta a Clásico en semifinales; una vez más los colosos del fútbol costarricenses se volverán a encontrar en esta fase, con la salvedad que los morados les tocaría cerrar de locales; ojala se pueda solucionar el tema del aforo para poder utilizar el estadio Ricardo Saprissa en esta instancia tan definitiva.
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