El ex árbitro costarricense y analista, Orlando Portocarrero, realizó un análisis del arbitraje durante el Torneo de Apertura 2023.
Portocarrero señaló que el arbitraje quedó en total deuda a lo largo del torneo nacional y eso también es un reflejo del mal momento que vive la Selección.
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De igual forma, el analista indicó que mantiene la calma ante el trabajo de Horacio Esquivel al frente de la Comisión de Arbitraje, esto porque le gusta creer en los procesos a largo plazo.
Entrevista a Orlando Portocarrero
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¿Cómo vio el arbitraje en el Apertura?
Bueno, yo decirle y a todos los seguidores de este gran programa Al Pie del Deporte en 107.1 FM, de verdad que el arbitraje en este país está en deuda, en este recién terminado Torneo de Apertura tiene nota roja el arbitraje, está en deuda y vamos a hacer claros, usted lo sabe muy bien y todos los que estamos insertos en lo que es el fútbol el arbitraje, el fútbol no anda bien, lo podemos ver reflejado en las selecciones nacionales, específicamente la selección mayor y si el fútbol nuestro anda mal, el arbitraje también anda mal. Entonces el arbitraje está íntimamente ligado con el fútbol y ese es el resultado, no podemos ver resultados diferentes y siempre se va a ver lo mismo, también no es sólo responsabilidad de esta escuela, es responsabilidad del informante de la escuela, que lo que es la parte de la federación costarricense porque esto atrae o suma una valga la redundancia, una serie de elementos o insumos que vienen arrastrando desde hace 23 años con las antiguas comisiones arbitrales, donde han tenido administraciones nefastas, malísimas, en donde no han sacado árbitros, aparte de que las generaciones arbitrales no han sido las mejores, en donde se ha dejado de lado la instrucción y vuelvo y específicamente ahora en la era de de el argentino Horacio, don Horacio Elizondo. Muchos se preguntarán, ¿qué ha ganado el arbitraje con la llegada de don Horacio? Bueno, don Horacio tiene escasos tres meses de estar en Costa Rica, y entonces yo le doy, yo siento que si usted me pregunta en esos tres meses, no se le ha visto nada, nada, pero yo soy un tipo que creo en los procesos, y yo creo que a don Horacio se le doy el beneficio y la duda, porque faltan procesos. Meramente está conociendo la cultura del fútbol costarricense, la idiosincrasia del costarricense, y tiene mucho que hacer. Y vaya que sí tiene mucho trabajo, está recién terminando el Torneo de Apertura, y ya creo que a mediados de enero ya está empezando el Torneo de Clausura. Entonces, los árbitros ahorita entraron ya en un proceso de descanso pasivo, que no pueden descuidarse, vienen pruebas físicas, también vienen pruebas médicas, donde ellos tienen que estar debidamente preparados, igual, hacer una digo yo una especie de mini pretemporada, y estar listos al pie, igual que los jugadores al cien por ciento. ¿Y por qué digo esto? Porque se juega en este próximo torneo el no descenso. Entonces, ellos tienen que estar al cien por ciento y dar lo mejor, porque el arbitraje realmente quedó en números rojos. Si usted me pregunta a mí, ¿cuánto le pondría a usted una una cifra matemática? Yo rondaría que anda entre el 4,5 al 5 de un 50, hablemos así, a lo tico. Reprobado, reprobado. Reprobado. Tanto árbitros principales como árbitros asistentes.
¿Qué lo lleva a reprobar el arbitraje del fútbol nacional?
Bueno, las argumentaciones son muy sencillos. Los arbitrajes han sido nefastos, han sido muy malos. Usted ve que los árbitros, los los dirigentes se quejan de los trabajos, pero lo peor de todo es que siguen siendo, usted ve a los dirigentes quejándose que el árbitro hizo esto, dejó de hacer esto, o el otro, y la semana siguiente, en lugar de hacer la corrección, se vuelve a caer lo mismo. Entonces, hay un conformismo, hace falta mucho trabajo, más trabajo, porque el arbitraje este está de capa caída. Los trabajos, decisiones arbitrales. Y si usted me pregunta a mí, ¿en qué mejorado? Mire, levemente, el arbitraje costarricense dentro del terreno de juego ha mejorado levemente que hay una mayor fluidez, ya el árbitro para hacerlo así a la tica, y que la gente pueda entender de la mejor forma, el árbitro ya no pita tonterías, cochinaditas, ya realmente le ha dado mayor fluidez, pero un poquito, le falta mucho, y eso es una tarea-
¿Qué le falta, Orlando?
Bueno, le falta instrucción, le falta trabajo, le falta mucho, pero apenas esto se está viendo la punta del iceberg, porque nosotros, los directores técnicos, los dirigentes, y los mismos jugadores, se quejan que el fútbol costarricense está carente de ritmo, pero ¿quién también es responsable que de ese ritmo? El árbitro, porque si se pone a sancionar, o a discriminar simples faltas, le va a dar eso, y es por eso la queja, que los jugadores llegan a la selección, y esa falta de ritmo, ¿y por qué? Porque el árbitro también ha sido permisivo, ha sido falta de carácter, de saber discriminar las faltas, y estar en el lugar. ¿Cuál es la mejor posición que requiere el árbitro de entrar en el juego? No es aquella que que tiene que ir diagonalmente, y que tiene que estar, no, no, no, es donde la acción de juego así lo requiera, y el árbitro, y que quede claro, muchos árbitros tienen una una condición bárbara, pero el hecho de estar cerca de la acción de juego, no le determina que usted vaya, o el árbitro vaya a tomar una buena decisión, una buena discriminación. Yo siento que el árbitro le falta, le faltan muchos factores. ¿Y qué es lo que ha pasado, don Everardo, y los de Al Pie del Deporte? ¿Qué es lo que ha faltado? El árbitro no solamente ya tenemos que dejar de ver que una prueba física, una prueba escrita es suficiente, no, hay que hacer verdaderos procesos, también la parte mental, tiene que saber, el árbitro tiene que desarrollar esa parte, la resolución alternativa de conflictos, la inteligencia emocional, el pánico escénico, los escenarios, dominar la parte motora, la parte cognitiva, y esos son elementos, que el árbitro está carente hoy en día en el arbitraje costarricense, don Everardo.
¿Por qué muchos árbitros cuando se retiran terminan enojados con el gremio?
Siempre los árbitros terminan, y vienen demandas, y vienen, usted ve que, yo no sé hasta qué punto la Federación Costarricense no ha ganado ninguna demanda, siempre las pierde, siempre le tienen que pagar a los árbitros, porque hay un vínculo, lo que no quieren es que haya un vínculo obrero patronal, pero ya hay en la parte de legal jurisprudencia, ya se ha demostrado en la parte laboral que hay un vínculo. Entonces, el árbitro se va resentido, ya no se va a pagar, ya no se va a pagar, o o se va resentido en el sentido que dicen, bueno, no vamos a contar más con sus servicios, entonces, muy fácil, el árbitro va y pone la denuncia en el juzgado a nivel laboral, y después vienen las demandas, y después vienen los arreglos, porque le deben tantos millones, y la federación, y para nadie es un secreto, don Everardo, la Federación ha pagado millones de millones de colones. Entonces, por eso es, pero definitivamente, bueno, yo me fui del arbitraje, y no tengo queja, yo me fui porque yo soy un profesional, y yo nunca he vivido del arbitraje, y yo no vivo del arbitraje, son muy pocos los que hemos retirado del arbitraje sin hablar más del arbitraje, porque en realidad yo no vivo de esto, mi fuerte es la parte del alma mater, la parte de la academia, soy academista, cien por ciento, y no vivo del arbitraje.
¿Cómo ve la evolución de Juan Gabriel Calderón?
Bueno, yo tengo un buen concepto de Juan Gabriel Calderón, el hijo predilecto allá de Pérez Zeledón, lo conozco muy bien, hemos seguido. -Del águila de Pérez Zeledón, tierra de sembradores de frijoles-. Así es, un saludo, de verdad, una familia, gente humilde, trabajadora. Y yo le puedo decir que Juan Gabriel es un tipo, es un buen ser humano, un muchacho que se fuerza, se dedica al cien por ciento al arbitraje, con ayudas agrícolas a su padre, a su familia, y lo hace de muy buena forma, se esfuerza todos los días, pero no solamente en el campo arbitral. Yo le puedo decir que yo le hice pruebas de inglés a Juan Gabriel Calderón y muy solvente en la parte del inglés, se fuerza en la parte inglés, ha buscado, ha tratado de buscar ayuda para el mejoramiento, no solamente en la parte arbitral, sino en todos los campos de la vida, porque yo no puedo ser mejor árbitro sin don Bernardo, no puedo ser mejor árbitro si no soy una buena persona, y entiéndase, buena persona, en la parte de valores, de formación, de cultivarse académicamente, de convivir, de convivir. Es correcto, es la convivencia, y Juan Gabriel ha tenido ese elemento. ¿Qué es lo que pasa? Que Juan Gabriel Calderón es un árbitro que ha mejorado, y lo podemos ver en esta recién final, que acaba de ocurrir, y lo hizo con muy buen suceso. Me parece que Juan Gabriel hizo un buen trabajo, y coronó por algo, creo que me parece a mí, y lo que he visto, y le he dado seguimiento, no me cabe la menor duda que Juan Gabriel podría ser, o es un candidato, oígase bien, no es que va a estar, es un candidato serio para estar en el Mundial, en los Estados Unidos, que se va a celebrar en América. -Orlando, sin embargo, no le validó un gol legítimo a Javon East con esa prisa-. Ok, pero es que eso es un trabajo en equipo, y ¿quién lo hizo incurrir en esa falta, don Everardo? Un árbitro. Emanuel Alvarado. No, no fue Emanuel Alvarado, fue uno de los árbitros que ha tenido, y vamos a tocar este caso, uno del, para mí, uno de los árbitros asistentes en los últimos diez años mejores de este país, como lo es el abuelo, porque está presto a cumplir 51 años, este es un árbitro asistente récord, como lo es Osvaldo Gerardo Luna Gutiérrez. -Osvaldo Luna, perdón-. Es uno de los mejores árbitros asistentes que hemos tenido en los últimos días, quince años. ¿Cuántos partidos dirigió? Dirigió, o dirigió no, o estuvo presente como asistente en en este torneo, 22, 23 partidos. Se equivocó, por supuesto, era una acción, se le da el beneficio de la duda, una acción muy rápida, una acción donde hay mucha gente, y se se equivocó. Un impacto en el partido. Es humano errar. Si se equivocó, no podemos soslayar eso. Hubo un error, que al final, influyó en el marcador, don Everardo, ¿qué considera usted? Influyó, OK. El Deportivo Saprissa se coronó campeón, porque ganó con méritos propios, pero sí hubo un error bastante de bulto, digámoslo así, que impactó al final del partido. Pero eso es error de humanos, ¿y qué es lo que se busca el arbitraje? Que siempre van a haber errores, por supuesto, pero que estos errores no generen un impacto al final del partido. Y cuando yo digo al final del partido, que se se vio beneficiado X equipo o Y equipo, y para eso se requiere mucho, mucho trabajo.
¿Qué espera del trabajo de Horacio Elizondo?
Yo espero mucho de este señor, del señor Elizondo Horacio. Primero que todo, yo voy a decir que es un árbitro, fue un árbitro que todo el mundo los yo fui uno de los fans de él, porque fue un gran árbitro, un árbitro que tiene más de 400 partidos en la liga de Argentina, Liga Profesional Argentina, que estuvo en mundiales, que ha estado en Copa Libertadores, es un árbitro con un bagaje, digámoslo así, profesional de lo mejor, pero no es lo mismo y ha estado también en las diferentes palestras o esferas del arbitraje suramericano como lo es Paraguay, lo ha estado en la misma Argentina y viene acá y tiene tres meses. ¿Qué espero? Espero mucho, espero mucho porque en tres meses yo soy un tipo de proceso, nosotros educadores y formadores creemos en los procesos, no podemos hacer cambios diferentes de la noche a la mañana.
Entonces, pero en tres meses se ha abocado meramente a subsanar cosas básicas, pero ya es hora que le tiene que meter bisturí porque primero tiene que hacer, y mire, yo tengo una serie, una serie de situaciones que se deben dar. Primero se debe el material humano con el que cuenta. Ahora, ahorita el grupo, el panel arbitral son 80 árbitros, tiene que aumentar el número mínimo a 100 árbitros para que haya mayor escogencia, mayor selección de calidad.
Tiene que, aparte de profesionalizar, es que profesionalizar no solamente es en el terreno de juego, sino darle las condiciones mínimas a los árbitros, también darle condiciones que desarrollen un mejor arbitraje porque el árbitro está en la palestra siempre de todos y ahora que se está dedicando, mírenlo, ya por lo menos hay voluntad porque en la comisión, perdón, en el directorio de la Federación anterior solo se quedaba así en el aire, pero ya por lo menos hay voluntad para que se pueda hacer un mejor arbitraje.
Traer a Costa Rica dentro de un año y esperemos Dios mediante que dentro de un año estemos gozando de un instrumento, una herramienta básica como lo es el VAR. El VAR es importante en este país, en el fútbol, pero no crean que el VAR va a venir a solventar los problemas arbitrales. Aquí se requiere más trabajo, mucho trabajo en el campo arbitral, trabajo de campo. ¿Qué es lo que está haciendo? Yo he conversado y dialogo con los árbitros. ¿Qué es lo que pasa? Él está tratando de llevar a los entrenamientos situaciones reales de juego. Le está exigiendo a los árbitros mayor exigencia en donde juega no solamente la parte física, la parte mental, sino la parte alternativa de resolución y la parte de saber discriminar las faltas y cómo tomar esas decisiones correctamente. Entonces, hay momentos de exigencia y yo siento que se le verá el tiempo prudencial.
Bueno, yo siento que anda en boca de que se ha, que se ha invertido más de 20 mil dólares en el pago mensual del señor Elizondo. Bueno, hasta la fecha, como lo digo, hay procesos, creo en los procesos, pero estos tres meses no se ha visto buena inversión en ese dinero. Yo creo, si usted me pregunta a mí, yo creo que, bueno, esa presencia por sí sola da muchas cosas que decir, pero yo creo que aquí tenemos un material humano, suficiente capacidad humana de ex árbitros, que tienen capacidad dos o tres personas que pudieran hecho un trabajo mucho más barato, en igual o mejor calidad que lo que lo está haciendo este señor. Porque también no solamente es la imagen de él, se requieren, don Everardo, Nicole y mi amigo Diego, se requieren cambios estructurales.
¿Qué quiero decir con esto? Hay una comisión técnica que ya ha hecho siempre lo mismo en la federación, y esa comisión técnica ya cumplió su ciclo de vida. Es una comisión que está precedida por uno, dos y hasta tres personas que han hecho lo mismo durante tres, cuatro años. Entonces los cambios no pueden ser los mismos. Ellos son parte de ese debacle de hace seis, un año, dos años, y ahora vienen a despertar que van a traer algo nuevo. No, ellos deben de irse. Ya cumplieron un ciclo de vida, de trabajo, y si son personas inteligentes, deberían de hacerse a un lado de decir, yo ya cumplí un ciclo. Con esto no estoy diciendo que no sepan. Sí saben porque son personas que se han instruido. Pero dígame usted, una persona que se dedica al cien por ciento a la arbitraria.
Yo hablo de todo el sistema. Hay gente que puede llegarlo a ser de igual forma. Porque usted, hablar de arbitraje, y arbitraje, y más arbitraje, hablar de las diecisiete reglas, hablar de directrices de FIFA, eso reiterativo, repetitivo, se vuelve mecánico. Entonces se vuelve automático en esto. Y no solamente se requiere saber todo eso, sino también trabajar con materia prima humana es muy sensible y el manejo no se está utilizando de la mejor forma. No hay credibilidad de parte de los árbitros hacia esas personas que están hoy en día.
¿Cómo cataloga el trabajo de Randall Poveda en la Comisión de Arbitraje?
Yo le tengo un cariño a mi buen amigo y hermano Randall Alberto Poveda Cascante, pero fue una de las comisiones peores que he visto en los últimos años, don Everardo. Y hay que ser realista. Se lo he dicho. Realista. En dos años no vimos crecimiento de nada. Se quedó estancado. Pero también hay que estar ahí para decir por qué se quedó estancado. ¿Por qué? Porque ahí se manejan una serie de cosas que tal vez le impidieron crecer. Pero para mí, Randall Poveda, fue un estancamiento. Y no es a título personal, que quede claro esto. Yo me llevo muy bien con Randall y tengo una muy buena relación, pero las cosas hay que decirlas claramente. No podemos soslayar o ocultar dos años de estancamiento en el arbitraje costarricense. Y de verdad, ¿y quién fue partícipe de ellos? Los mismos que están ahí. Entonces, esta gente, si él ya se fue, hay que cumplir un ciclo. Y el presidente de la Federación es un tipo que sabe de esto, sabe de relaciones interpersonales, sabe de administración, y no solamente administrar, sino también administrar la parte humana. Es un elemento importante. Manejar seres humanos es una tarea muy difícil
¿Cuándo estuvo Carlos Batres? ¿Cuál es su criterio, el guatemalteco?
Bueno, cuando estuvo Carlos Batres, yo recuerdo yo estuve, si acaso, dos, tres meses en la comisión. Y Carlos Batres no hizo un trabajo de lo mejor. No lo hizo. Pero se vio algo que lo que se buscaba. Pero también Carlos Batres, me parece a mí, que hizo un trabajo más que aceptable. Pero también siento que el mismo sistema lo absorbió, don Everardo. Se dejan cosas de hacer.
