En una segunda vuelta con la más alta abstención en varias décadas, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, retuvo el poder y continuará al frente de la segunda economía europea tras imponerse en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales a la líder de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, con el 58,2%.
Los franceses fueron a las urnas este domingo para elegir entre el presidente en funciones, Macron, y la líder de extrema derecha, Le Pen. Antes de conocerse los resultados, Macron ya se sondeaba como el favorito, pero la dirigente ultraderechista quedó más cerca de la presidencia que nunca, en su tercera contienda electoral por el ejecutivo en Francia.
Le Pen, instantes después de haberse conocido los resultados, expresó su gratitud a sus votantes. “Millones de personas han decidido el cambio, quiero darles las gracias a quienes me han votado”, dijo.
Y agregó: “Siento esperanza porque este resultado constituye el testimonio de la gran confianza del pueblo francés, que es la aspiración de un cambio”.
El margen de la victoria de Macron fue mucho más estrecho que el de hace cinco años, cuando primer mandatario se impuso a Le Pen por más de 30 puntos porcentuales. Entre los factores que contribuyeron al ascenso de la líder de extrema derecha están sus esfuerzos por moderar su imagen —aunque no su plataforma—, la frustración de la gente por la situación económica, y el malestar general, del que los franceses suelen culpar al oficialismo de turno.
Quién es Emmanuel Macron
Emmanuel Macron nació en 1977 en Amiens, en una familia de médicos pertenecientes a la pequeña burguesía del norte de Francia. Su padre era profesor de neurología y su madre pediatra. Tiene dos hermanos.
Estudió en el colegio jesuita de la Providence de Amiens y aprendió a tocar piano en el Conservatorio de esa ciudad. Dejó el lugar para acabar su bachillerato en el liceo privado Henri IV de París.
Tras estudiar filosofía en la universidad de Nanterre, Macron entró al Instituto de Ciencias Políticas ('Sciences Po') y después a la Escuela Nacional de Administración (ENA).
Tuvo una carrera de banquero en el sector privado, un alto cargo en Rothschild et Compagnie, uno de los bancos de inversión más prestigiosos de Francia.
Después se convertió en consejero financiero del presidente de la República, una función de la administración pública. En 2012, comenzó a colaborar con el entonces primer mandatario François Hollande, primero como Secretario General adjunto de la presidencia, después como Ministro de Economía, Recuperación Productiva y Asuntos Digitales, cargo al que renunció en 2016 para lanzar su candidatura presidencial.
En ese entonces el ex banquero y ex ministro fue calificado como “un ovni de la política francesa” por su recorrido atípico, con poca experiencia en la política. Frente al escepticismo general, lanzó un movimiento que lleva sus iniciales '¡En Marcha!' (En Marche!), con financiamiento privado y al margen de los partidos tradicionales que han gobernado estas últimas décadas.
No había tenido un cargo de elección popular hasta las pasadas elecciones presidenciales, en 2017, cuando salió ampliamente ganador frente a la ultraderechista Marine le Pen con más de un 60% de los votos.
Ante sus compatriotas, Macron se presentó como un hombre íntegro y que asume ese recorrido fuera de lo común. Su estrategia fue rápidamente presentar a su esposa en las portadas de la prensa francesa, una profesora de teatro y de francés 25 años mayor que él: la ahora primera dama, Brigitte Trogneux-Macron..
En 2017 tenía 39 años, por lo que es el más joven presidente en la historia de Francia. Ahora tiene 44 años e inicia un segundo mandato.
Muchos analistas lo ven como un hombre complejo y con varios rostros, cuando otros lo acusan de ser un ególatra. Él mismo se califica de hombre de izquierda pero con una visión liberal en su libro autobiográfico “Revolución”.