Uno de los mayores misterios de la historia que siguen sin resolverse todavía es el origen del navegante Cristóbal Colón, fallecido en Valladolid el 20 de mayo de 1506. Sin embargo, la ciencia está a punto de poner fin al eterno debate sobre su procedencia, que se disputan diferentes países como Italia, España, Portugal, Croacia y Polonia.
Los restos óseos atribuidos a Colón, a su hijo Hernando y a su hermano Diego saldrán de la cámara de seguridad de la Universidad de Granada para ser analizados en la propia universidad y trasladados a diferentes laboratorios de identificación genética de Europa y América.
Una investigación que alcanzará su fase final con el estudio del ADN y que podría obligar a modificar los libros de historia.
Hace casi veinte años, José Antonio Lorente, catedrático de Medicina Forense de la Universidad de Granada dirigió un equipo multidisciplinar que logró exhumar el sepulcro del almirante situado en la Catedral de Sevilla y extraer parte de los restos para su posterior estudio. Desde el 2003, los huesos de Colón han permanecido a resguardo en una sala blindada de la Universidad andaluza.
Este jueves día 20 de mayo se cumplen 515 años de la muerte de Colón y será el momento escogido por el equipo de profesionales a cargo de la investigación para iniciar el análisis genético de los restos óseos atribuidos al descubridor del Nuevo Mundo, a su hijo Hernando y a su hermano Diego.
Se trata del momento más decisivo y el que ha requerido mayor tiempo de espera hasta disponer de una ingeniería genética avanzada que garantizara mayores posibilidades de éxito. Por tanto, será la investigación científica más ambiciosa sobre el origen de Colón, que recopila el trabajo desarrollado por las diferentes hipótesis surgidas hasta el momento y que cuentan con posible material genético de Cristóbal Colón. Valencia, Portugal, Cataluña, Galicia, Navarra o Mallorca serán algunas de las posibilidades que serán analizadas comparativamente por el equipo de Lorente. El análisis genético que se llevará a cabo en los próximos meses podría ser la pieza fundamental que unifique todas las ramas de trabajo y permita conocer un poco más sobre la vida del descubridor de América.
La tesis gallega
El posible origen gallego de Cristóbal Colón se postuló en 1898 como primera refutación al origen genovés, de mano del pontevedrés Celso García de la Riega. Los documentos, la toponimia y el lenguaje fueron la base fundamental del apoyo a una teoría sostenida por historiadores y académicos como Emilia Pardo Bazán, entre otros muchos. En 1928, fue silenciada por presiones políticas ante la inminente celebración de la Exposición Iberoamericana de Sevilla. La reciente legitimación de los históricos documentos por el Instituto del Patrimonio Cultural de España (2013), que contienen los apellidos «Colón» y «de Colón», al igual que las Capitulaciones de Santa Fe, podrían situar a la familia del navegante en Pontevedra, antes y durante el descubrimiento.
Fuente: Lavozdegalicia.es