20. Dragón descansando, por Gary Meredith, Australia
El Gran Desierto de Arena en Australia Occidental es el hogar de una amplia variedad de vida silvestre que coexiste con la minería en la zona. La vida salvaje que se encuentra en este entorno debe adaptarse a las duras y hostiles condiciones de vida. Cuando surge la oportunidad, el dragón hocicudo -Gowidon longirostris- hace uso de estructuras humanas. Este individuo se colocó sobre una tela metálica fuera de un taller, esperando los rayos del sol. La fuente de luz artificial fuera del edificio atrae polillas e insectos, presa fácil para un lagarto hambriento.