Conforme se fueron haciendo más públicas las figuras del narcotráfico en México, más interés se generó entre el público que quería saber cómo estas personas terminaban así y qué era aquello que guiaba sus acciones.
Esto dio inicio a series, películas y telenovelas enfocadas en el tema, y en los últimos años se enfatizó el crear nuevas obras basadas en personas reales. Una de las más populares fue La Reina del Sur, protagonizada por Kate del Castillo, que estaba basada en la vida y obra criminal de Sandra Ávila Beltrán quien, ahora, comienza una batalla legal para que Netflix y Telemundo entreguen regalías por dicha serie.
La Reina del Sur se estrenó en 2011 y por ahora lleva dos temporadas, con la última estrenándose en 2019 y la tercera en producción. La serie, con toques de telenovela clásica, fue producida por Telemundo y está basada en el libro del mismo nombre escrito por Arturo Pérez-Reverte.
A su vez, el autor se inspiró en la vida de Sandra Ávila Beltrán, más conocida como La Reina del Pacífico, una narcotraficante que se volvió figura clave para las empresas criminales y un enlace indispensable entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel colombiano Norte del Valle.
En su novela, Pérez-Reverte reveló mucho del pasado de Beltrán, quien fue finalmente aprehendida en 2007, aunque el escritor siempre mantuvo que mucho de su historia era mera ficción y rechazó la adaptación televisiva de Telemundo. Por su parte, la propia Sandra Ávila Beltrán decidió publicar una serie de entrevistas que mantuvo en la prisión con un periodista para que el mundo conociera cómo fueron sus primeros pasos en el mundo de las drogas y qué cosas fueron reales y cuáles exageradas por los medios.
La Reina del Sur fue tan popular en México y Latinoamérica que incluso se lanzó un remake estadounidense, con el formato clásico de sus series, protagonizado por Alice Braga. Queen of the South se estrenó en 2016 y tuvo cinco temporadas con 62 episodios. La respuesta ante el remake fue positiva, pero curiosamente nunca estuvo a la altura de los números vistos con la producción de Telemundo, empresa que se unió a Netflix para realizar la segunda temporada con Kate del Castillo regresando al rol.
A pesar de la mezcla entre ficción y hechos reales, parece que Sandra Ávila Beltrán quiere que se reconozca que La Reina del Sur está basada en ella y que, por esa razón, merece regalías por el éxito de la serie. Según Milenio y otros medios nacionales, la ex narcotraficante comenzó un proceso ante el Instituto Mexicano de la propiedad Industrial, asegurando que el personaje de Teresa Mendoza está basado en su vida y su uso permitió ganancias millonarias para Telemundo y Netflix. De manera más específica, Beltrán asegura que las productoras actuaron de manera dolosa y la desprestigiaron con una historia que recaudó muchísimo dinero.
Beltrán pide el 40% de las ganancias obtenidas, y el contexto podría estar a su favor, pues es cierto que las empresas no dudaron en usar la imagen de su arresto para promocionar la segunda temporada de La Reina del Sur. Además, explotando el interés por el narcotráfico y por la nueva libertad de Beltrán, la empresa dio luz verde a una tercera temporada que llegará en octubre.
Sandra Ávila Beltrán fue extraditada y sentenciada en Estados Unidos, pero de todos los crímenes que podían acusarla, finalmente se decidió que el de ayudar a lavar dinero para un narcotraficante era el más seguro para lograr encerrarla. Después de varios años en prisión, la mujer fue deportada a México en 2013 donde se le añadieron cargos, pero en 2015 finalmente salió luego de que revocaran su sentencia y por ahora no existen nuevos cargos en su contra ni una investigación específica contra ella, al menos no una que se conozca públicamente.
Fuente: Yahoo Noticias
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