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Un trozo de hielo que cayó de otro avión provocó aquí el caos de la nave de British Airways

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Un avión de la aerolínea, British Airways, que volaba de Costa Rica a Gatwick provocó que el vuelo sufriera una demora de 50 horas al caerle un trozo de hielo de otro avión en el parabrisas.

El avión que volaba de Costa Rica a Gatwick, Londres se encontraba a 35 mil pies cuando el hielo golpeó el parabrisas un hecho ocurre de uno en un millón.

Los pilotos de la aeronave debieron devolverse al país para que fuera reparado el Boeing 777, lo que supo que unos 200 pasajeros no pudieron pasar la Navidad con sus seres queridos.

El vuelo fue reprogramado para la noche del 24 de diciembre, pero ante la imposibilidad de desviar un avión que salió de Jamaica obligo a los pasajeros a pasar la noche en el hotel más cercano del aeropuerto.

El vuelo BA2236 debía partir de San José hacia Gatwick en la noche del 23 diciembre y en principio se le indicó a los pasajeros que tendrían un retraso de 90 minutos, es decir, hora y media, ya que el parabrisas requería de una reparación especializada.

Una pareja británica que se encontraba en el país celebrando su luna de miel contó al diario, The Independent, de la terrible odisea que vivieron.

"Estábamos tratando desesperadamente de encontrar un vuelo de conexión en este punto que nos llevaría a tiempo para no perdernos la Navidad familiar. La aplicación de BA decía algo vago como de un retraso del vuelo hasta el día siguiente. Sin embargo, el tiempo de vuelo mostró un retraso de cuatro horas. No habíamos recibido información por correo electrónico o mensaje, así que esperábamos que fuera solo un problema técnico", indicó Jo Mitchell.

"Dejamos nuestro coche y continuamos hasta el aeropuerto, esperamos desesperadamente que no fuera cierto", agregó.

Sin embargo, cuando llegaron al aeropuerto se dieron cuenta que era real y se unieron a un centenar de personas que se encontraban en la misma situación.

La pareja narró cómo buscaron alternativas para lograr llegar a su país antes de Navidad e incluso como otros pasajeros estaban furiosos y hasta llorando.

Los 200 pasajeros que se encontraban varados en el país pasaron la noche en el hotel del aeropuerto y fueron trasladados al día siguiente nuevamente al aeropuerto para que tomaran el vuelo a la 10:00 p.m., sin embargo, tampoco llegó a darse, ya que la tripulación del avión que estaría trasladándolos a Londres cumplía las horas de trabajo permitidas.

El vuelo de regreso a Gatwick, Londres, se realizó finalmente 25 de diciembre a las 6:50 p.m., y tuvieron que armarse de paciencia nuevamente por un retraso al no tener con exactitud el número de pasajeros que abordaron el vuelo.

El vuelo finalmente salió a las 8:35 p.m., del 25 de diciembre y llegó a Londres poco después de las 12:00 p.m.

Por su parte, la aerolínea por medio de un portavoz le brindó una sincera disculpa a los pasajeros afectos.

"Nos gustaría darle una sincera disculpa a los clientes de este vuelo, cuyos planes navideños se han arruinado. Nunca votaremos un avión a menos que consideremos que es completamente seguro hacerlos, y en esta ocasión, nuestros ingenieros no pudieron autorizar para volar", dijo.

"Desde entonces, nuestros equipos han estado trabajando entre bastidores para hacer todo lo posible para garantizar que un avión esté listo lo antes posible para traer clientes a Londres. Agradecemos la paciencia y la comprensión de nuestros clientes y nuestros ingenieros y compañeros de equipo que también han hecho todo lo posible para ayudar", finalizó.

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