El Observatorio de Dinámica Solar de la NASA registró un eclipse lunar del sol, visible solo desde su ubicación en el espacio.
En el momento de mayor cobertura, el viernes 25 de julio, la luna tapó cerca del 62 % del sol. El SDO, que funciona con energía solar, compensó la baja en la luz cargando por completo sus baterías antes del eclipse.
El SDO observa varios eclipses, o tránsitos lunares, cada año. Este fue un eclipse parcial profundo que duró unos 35 minutos. La nave estudia la atmósfera solar en distintas longitudes de onda de luz. Está en una órbita geoestacionaria alrededor de la Tierra, alineada con su rotación, a 35.789 kilómetros sobre una estación terrestre en White Sands, Nuevo México.
El SDO ofrece una vista del sol casi permanente, aunque con una perspectiva algo distinta a la que se tiene desde la superficie terrestre. A veces, su órbita lo lleva por detrás de la Tierra y eso provoca un eclipse desde su punto de vista. El 25 de julio, el SDO quedó detrás de la Luna y de la Tierra el mismo día, según informó la misión.
El próximo eclipse solar visible desde la Tierra será parcial, el 21 de septiembre. Ese día, la luna llegará a cubrir hasta el 80 % del sol, según se verá desde Nueva Zelanda, Tasmania (Australia), el océano Índico y la Antártida. Quienes lo observen deberán usar siempre gafas especiales para eclipse solar, y todas las cámaras o telescopios necesitarán filtros solares.
El próximo eclipse solar total visible desde la Tierra ocurrirá el 12 de agosto de 2026 y se podrá ver en partes de Groenlandia, el oeste de Islandia y el norte de España. En Islandia, la totalidad alcanzará su punto máximo con una duración de 2 minutos y 18 segundos.
Fuente: Forbes Argentina