En medio de la intensidad del Mundial de Clubes 2025, Fluminense vivió un episodio fuera de lo común que encendió las alarmas dentro y fuera del campo. Un hombre sin hogar logró burlar los controles de seguridad e ingresó al hotel donde se hospeda el equipo brasileño en Columbia, Carolina del Sur.
El incidente se produjo en la habitación del defensor Ignacio, quien descubrió el problema al no poder ingresar con su tarjeta de acceso. Al alertar al cuerpo técnico, el equipo de seguridad del Hotel Marriott Columbia fue llamado de inmediato. Para sorpresa de todos, al abrir la habitación encontraron al intruso durmiendo en la cama del jugador.
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A pesar de lo insólito de la situación, no se registraron robos ni daños materiales. El individuo fue desalojado sin oponer resistencia y la policía local inició una investigación para esclarecer cómo logró acceder a la zona reservada para los futbolistas, a pesar de los protocolos de seguridad impuestos por el torneo y el hotel.
Ni la FIFA ni el club carioca emitieron declaraciones oficiales, aunque el hecho ha generado inquietud entre los equipos participantes. Como respuesta, se reforzaron las medidas de seguridad en el hotel para prevenir nuevos incidentes.
Mientras tanto, en el terreno de juego, Fluminense vive un buen momento. Tras empatar 0-0 con Borussia Dortmund y vencer 4-2 al Ulsan de Corea del Sur, el conjunto brasileño lidera el Grupo F junto a los alemanes. Ahora buscará asegurar su clasificación ante el Mamelodi Sundowns de Sudáfrica, en un duelo clave que se disputará en el Hard Rock Stadium de Miami.
El equipo también debe cuidar su disciplina: Nonato, Martinelli y Keno están al borde de la suspensión por acumulación de tarjetas amarillas. Según el reglamento, las amonestaciones solo se limpian después de los cuartos de final.
Jhon Arias, mediocampista del “Flu”, anticipó el choque decisivo con optimismo: “Miami me trae recuerdos, aunque esta vez es diferente. Tenemos la oportunidad de clasificar y hay que aprovecharla”.
Fluminense no solo busca avanzar en el Mundial de Clubes, sino también dejar atrás cualquier distracción externa que pueda desviar su atención del objetivo principal: alcanzar la gloria internacional.
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