Uno de los primeros ídolos sudamericanos del equipo blaugrana perdió la vida este lunes luego de haber estado internado en las últimas semanas.
Cuando se habla del Barcelona, han pasado una gran cantidad de jugadores que han marcado épocas y estarán siempre en la memoria de los aficionados.
Este lunes 30 de diciembre, falleció el recordado jugador peruano Hugo Sotil a la edad de 75 años luego de haber estado varios días en la unidad de cuidados intensivos por unos problemas de salud.
El “Cholo” partió en la madrugada de Lima y la noticia ya fue confirmada por los grandes medios internacionales que lamentan su suceso.
Sotil es recordado por ser uno de los mejores jugadores peruanos de toda la historia, integrando el Barcelona durante los 70s donde significó el primer ídolo sudamericano blaugrana por su gran nivel y su aporte al equipo que lo llevó rápidamente a ser querido por la afición.
Por si fuera poco, la página oficial del club de Catalunya extendió sus condolencias con un amplio artículo, en cuyas líneas se destacó cada uno de los mejores pasajes de mediapunta peruano, quien llegó a conformar una dupla imponente con el legendario jugador neerlandés Johan Cruyff.
“Este lunes 30 de diciembre, ha muerto Hugo Sotil . Nacido en Ica (Perú) el 18 de mayo de 1949, fue considerado uno de los mejores jugadores sudamericanos de su tiempo . El popular Cholo robó el corazón de los aficionados azulgranas de su época. Delantero hábil, escurridizo, valiente e intuitivo, su juego siempre era sinónimo de espectáculo”, comunicó el Barca en sus plataformas de redes sociales.
Sotil llegó al Barcelona a inicios de la temporada 1973-74 procedente del Deportivo Municipal. Altos mandos del club viajaron hasta Lima para cerrar un acuerdo inmediato con el reconocido Teófilo Cubillas, pero al presenciar un partido de la liga peruana quedaron maravillados con el talento de Hugo; de tal manera que decidieron cambiar de objetivo y cerraron cuanto antes su incorporación a las filas azulgranas.
Fue un delantero hábil, de magnífico regate, manejo de ambos perfiles, eléctrico y pícaro, de rápida definición dentro del área, que no tardó en convertirse rápidamente en uno de los mejores jugadores de América en la década del setenta. También jugó de mediocampista ofensivo y fue un gran asistente del fútbol, debido a la gran cantidad de pases de gol que ofreció a sus compañeros.
Se convirtió en el primer jugador latinoamericano en vestir la camiseta con el número 10 en el Barcelona. Portando en su espalda el número 10 consiguió una Liga española y dos subcampeonatos de liga tras cuatro temporadas con la camiseta azulgrana donde significó el gran ascenso del equipo culé en la historia del fútbol español.
Finalmente en 1977 regresó a Perú y se consagró bicampeón nacional con Alianza Lima en 1977 y 1978 donde es recordado como una leyenda.
Fue internacional con la selección peruana, con la que jugó dos ediciones de la Copa Mundial: las de 1970 y 1978, donde llegó a cuartos de final en ambos mundiales. A nivel continental, ganó la Copa América en 1975, donde hizo el único gol del partido definitivo ante Colombia dándole el título de Campeones de América a la selección peruana.
Su carrera fue brillante, pero muy corta, aunque suficiente para dejar una huella imborrable en la afición peruana que gozó de su extraordinaria habilidad, gambeta y también de su humildad, lo que le permitió tener una gran popularidad. Su vida es comparada por los entendidos del fútbol, con George Best, jugador de Irlanda del Norte que al igual que Sotil acabaría rápidamente su carrera, debido al alcohol, un hecho que al peruano le costó su continuidad en el Barcelona y vería como su carrera se venía abajo teniendo que regresar a Perú.
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