La separación entre Wanda Nara y el futbolista argentino Mauro Icardi ha capturado la atención mediática, especialmente tras la confirmación del romance de Wanda con el cantante L-Gante.
Este nuevo capítulo ha llevado a la pareja a avanzar rápidamente en sus planes de divorcio, lo que incluye la división de bienes y la custodia de sus hijas.
La situación se ha vuelto aún más tensa debido a los rencores acumulados desde el escándalo conocido como “Wandagate“, donde Icardi fue infiel a Nara con la actriz China Suárez.
Recientemente, se ha revelado un chat polémico en el que Mauro confronta a Wanda sobre una supuesta infidelidad con Keita Baldé, un ex compañero del futbolista en el Inter de Milán.
Este intercambio de mensajes ha reavivado viejas heridas y ha puesto de manifiesto la falta de confianza entre ambos.
La situación se complica aún más con la intervención de Simona Guatieri, ex esposa de Baldé, quien confirmó que el Icardi se comunicó con ella para hablar sobre el affair entre su esposo y Wanda.
La revelación de un video de las cámaras de seguridad del hogar de la pareja en Milán ha sido un punto crucial en esta disputa.
En el chat, Icardi comparte capturas que muestran a Baldé dentro de su casa, lo que desata una serie de reacciones de incredulidad y dolor por parte de Mauro. Su mensaje, “En mi casa. No lo puedo creer. ¿Por qué? ¡Dios! No me merezco esto“, refleja la traición que siente mientras Wanda responde de manera evasiva, desviando la atención hacia las infidelidades pasadas del delantero.
Este intercambio no solo ha intensificado la guerra mediática entre ambos, sino que también podría tener repercusiones legales significativas.
Las imágenes de las cámaras de seguridad se consideran pruebas contundentes que el actual jugador del Galatasaray de Turquía podría utilizar en su favor durante el juicio por la custodia de sus hijas.
La situación es un recordatorio de cómo las relaciones personales pueden volverse públicas y conflictivas, especialmente cuando hay hijos involucrados.
A medida que avanza esta historia, queda la pregunta de cómo se resolverán estos conflictos. La batalla legal entre Wanda y Mauro promete ser larga y complicada, con ambos buscando proteger sus intereses y los de sus hijas.
La atención del público sigue centrada en esta novela, que parece no tener un final claro a la vista.
Las acusaciones cruzadas entre Wanda Nara y Mauro Icardi
A principios de este mes, Wanda estuvo sentada en el sillón de Susana Giménez y disparó contra el delantero que se está recuperando de una grave lesión ligamentaria. "Fue un quiebre. No me afectó ella como persona, sino todo lo que se generó alrededor. Encontré chats, fotos, incluso hablábamos como conocidas antes del escándalo", explicó acerca de la infidelidad de Icardi con la China Suárez. "Tengo las reservas, tengo los mails, tengo los pagos... No fue solo una noche, yo encontré chats, fotos, videos... Incluso yo tenía conversación con ella, hablábamos de nuestros maridos e hijos. No éramos amigas, pero nos saludábamos para nuestros cumpleaños. Yo estoy segura que la culpa es del hombre. Mauro pagó un precio muy alto, la familia pagó...", concluyó.
El rosarino no se quedó callado y la acusó de haberle pagado con la misma moneda. "Te victimizaste después de haberte jactado ante los periodistas que criticas de contarles que me engañaste a mí y a tus hijas desde hace tres años. Aseveraste ser infiel, vos lo afirmaste", arrancó el futbolista. Y lejos de bajarse del ring, lanzó una acusación: "Te olvidas que mientras yo cuidaba a mis hijas y a sus hermanos creyendo que estabas trabajando vos estabas viviendo una doble vida".
Por último, intentó marcar las diferencias entre ambas situaciones: "Yo cometí un error y te lo dije primero a vos. Pudiste elegir, te di la chance. Vos elegiste fingir demencia y seguir porque nadie te obligó. Qué te llevo a quedarte y tener doble vida no lo sé".