Dani Alves y su defensa trabajan a contrarreloj para demostrar su inocencia tras la presunta agresión sexual cometida el pasado 30 de diciembre en un local nocturno de Barcelona.
En un principio, el futbolista se enfrenta a una pena de entre ocho y diez años de prisión, por lo que su abogado, Cristóbal Martell, busca encontrar cualquier resquicio al que poder agarrarse.
Tal y como ha señalado el periodista Jesús Albalat en el programa español Espejo Público, la defensa del exjugador del FC Barcelona o Sevilla se ha centrado en poner sus esfuerzos en una supuesta "distorsión narrativa" de la joven que acusa a Dani Alves de forzarla en los baños de la discoteca Sutton. Una estrategia para la que han recurrido a un examen psicológico.
"La jueza que investiga el caso ordenó hacer al Instituto de Medicina Forense un informe pericial sobre las secuelas que puede estar sufriendo la víctima. Hasta ahí, normal. Es habitual en estos casos que se haga. ¿Qué pasó? El abogado, Cristóbal Martell, presentó una petición para que en esa prueba psicológica interviniera un perito de parte, es decir, un profesional pagado por Dani Alves. Y que se grabara esa prueba psicológica. Hechos completamente inhabituales en un juzgado", apuntó Albalat en el programa.
"La instrucción está prácticamente finalizada, lo que pasa es que falta y se plantea una batalla legal en la prueba psicológica que se le tiene que hacer a la joven. La jueza aceptó la petición de la defensa de que en el mismo acto participara el forense de parte y grabarlo. Se aceptó el peritaje conjunto y no grabarlo. Y Cristóbal Martell ha presentado un recurso porque considera que se tiene que grabar", añadió.
Una búsqueda de argumentos en los que ya trabaja la defensa encabezada por Cristóbal Martell para tratar de desacreditar a la víctima. Mientras tanto, la joven se encuentra en tratamiento psiquiátrico tras ese duro episodio vivido hace poco más de dos meses.
Según recalcó Albalat, el objetivo de Martell es "poner en duda la veracidad de las declaraciones de la víctima y fundamentar una 'narración distorsionada' de los hechos es fundamental para la defensa del brasileño, que sigue poniendo el 'consentimiento' en el centro de su plan judicial".
Juzgado este año
Dani Alves será juzgado, si todo sigue el plazo propuesto, este 2023. Ahora mismo, el jugador se encuentra en prisión preventiva y sin fianza tras la decisión de la Audiencia de Barcelona. El alto riesgo de fuga, su contradicción en las versiones y los altos indicios de culpabilidad provocaron que el brasileño siga en prisión hasta que se celebre el juicio.
La Fiscalía quiere pedir para el futbolista una dura condena en base "a un delito de agresión sexual con penetración del artículo 179 del Código Penal que tiene prevista una pena entre 4 y 12 años de prisión". El problema para el jugador es que no se partirá desde la condena mínima, ya que comenzará a pedirla desde 8 años por lo que puede ser aún mayor.
Para evitar que ascienda, el abogado penalista Cristóbal Martell ya trabaja a destajo en la defensa de Dani Alves, que se encuentra en un momento muy crítico mientras sigue encerrado en la prisión de Brians 2.