En Brasil son muchos los futbolistas que profesan la fe del critianismo. Uno de los más fervientes seguidores es Alisson. El portero del Liverpool siempre lleva una camiseta con motivos religiosos debajo de la del equipo cuando juega.
Ha sido el arquero quien ha llevado a un nuevo jugador ante la luz del Señor. Roberto Firmino recibió este miércoles su bautismo de manos de su compañero de vestuario.
"Jesús es amor, no tiene explicación. Basta con creer en él y sentir el Espíritu Santo", comentó el delantero antes de fundirse en un abrazo con Alisson.
Tanto el goleador como el guardameta han tenido un 2019 muy exitoso, en lo individual y también colectivamente. En este inicio de 2020 buscarán revalidar este buen pasar, y seguir dominando tanto a nivel local como internacional.
