Ricardo Antonio La Volpe, entonces entrenador de los Azulcremas, depositó su confianza en él, ya que demostró el talento para destacar en la primera división de la Liga MX y lo debutó. Eso ha quedado en el pasado, pues actualmente lucha por tener minutos en el terreno de juego.
En 2018, el Real Betis de la liga de España puso sus ojos en el futbolista que apenas rebasaba la mayoría de edad. Tras varias negociaciones, los Verdiblancos pagaron cerca de 15 millones de dólares por el atacante.
En la prensa mexicana criticaron al canterano águila por su apresurada decisión de querer jugar en el Viejo Continente. Para algunos, Diego Lainez tenía que esperar una campaña más en el torneo azteca para consolidarse y así emigrar al extranjero.
Tan solo aterrizar en territorio ibérico, Lainez cargó con una loza que hasta el día de hoy le ha pesado; lo catalogaron como el ‘Messi mexicano’. Su conducción de balón y sus regates en espacios cortos le sirvieron para recibir tal apodo, aunque el único parecido que tiene con el astro argentino es la cabellera que tenía Messi cuando apenas se daba a conocer en el mundo futbolístico. Apenas en su presentación con el Betis, los reporteros le cuestionaron dicho mote.
Con Manuel Pellegrini al frente de los Verderones, la ‘joya mexicana’ trabajó para tener un puesto en el cuadro titular, así como los cuatro técnicos anteriores. El extremo luchó por ganarse la confianza del Ingeniero y nunca lo logró del todo. Con Pellegrini como entrenador del Betis desde 2020, Diego aparecía en la banca y en las gradas sin ser un constante en el once inicial.
En entrevista para TUDN, Lainez aseguró que le pesó llegar a una liga con diferente ritmo de juego y con mayor velocidad del esférico. “Lo que más me costó fue al principio en España porque llegas a una nueva liga. Es muy diferente a México. La velocidad es distinta y en un principio fue difícil porque ves el balón muy rápido”, comentó.
Luego de cuatro años con el Real Betis y sin ser un titular indiscutible, Lainez buscó minutos fuera del conjunto bético. La siguiente parada fue el Sporting de Braga de la liga de Portugal. Siendo una categoría inferior a la liga española, se esperaba que Diego Lainez se consolidara como una pieza fundamental de los Arzobispos.
El debut de Lainez con el Braga llegó en agosto de 2022, a tres meses de comenzar la Copa del Mundo de Qatar 2022, donde también lucharía por estar entre los 26 convocados por Gerardo Martino. El delantero batalló para estar en la oncena inicial del Braga y tampoco lo consiguió.
Recientemente, el Braga jugó la fecha 15 de la Primeira Liga y Lainez no fue ni a la banca. De ese modo, ya son cuatro años en Europa donde Lainez no ha sido titular en ningún equipo donde ha estado. El tema no es la confianza del técnico en turno, ya que desde que salió de América, han sido cinco técnicos con los que ha estado y no ha podido convencer a ninguno de ellos.
En Betis, pasaron entrenadores como Quique Setién, Rubi, Alexis Trujillo y Manuel Pellegrini. Ahora, en el Braga, Artur Jorge ha utilizado a Lainez como revulsivo, por lo que de cinco técnicos, van cero convencidos. Sin mencionar que el Tata Martino lo bajó del barco previo al Mundial de Qatar 2022 y únicamente se quedó con las ganas de jugar su primera justa internacional.
El jugador que vendieron como estrella y el futuro Messi, hoy a sus 22 años de edad está desaparecido y se mantiene lejos de llegar a la élite del futbol europeo. La última actuación destacada que se vio del jugador fue en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, celebrados en 2021 por tema de pandemia. En el torneo con límite de edad fue titular en el esquema de Jaime Lozano. De no ser por los Olímpicos, el peto y la banca han sido constantes en la carrera de Diego Lainez en Europa.
Por si fuera poco, el valor de mercado de Diego ha ido en picada desde que abandonó Coapa. Con 22 años de edad, el tabasqueño se ha devaluado tres cuartas partes de cuando salió del Club América. Al día de hoy, 3.85 millones de dólares respaldan el precio del mexicano, según Transfermarkt.
Fuente: Yahoo Deportes
