El encuentro del miércoles fue vibrante, ambas escuadras se jugaban la vida; los locales salieron con la misma oncena y el mismo esquema de juego que en los encuentros anteriores.
Los visitantes plantaron una férrea defensa y en zona de ataque pusieron elementos punzantes para hacer daño en las contras. Dicha fórmula estuvo cerca de dar resultados en la primera parte, pues las dos acciones más claras fueron obra de los dirigidos por el técnico Jose Giacone.
El panorama pintaba complicado para los morados, pues habían sido maniatados por el buen hacer visitante; aquí apareció la pericia de Jeaustin Campos que hizo ajustes en el sistema y además hizo ingresar a dos “primeras espadas” como Christian Bolaños y Kendall Waston para poder darle vuelta al cotejo. La aparición del segundo fue fundamental; el estratega tibaseño situó al gigante de ébano en la posición de “nueve” y de una intervención suya en el área nació la anotación de Jimmy Marín que hizo saltar la algarabía el estadio Ricardo Saprissa e hizo vibrar a una afición que el día de ayer se hizo sentir más que nunca (como vibra “la cueva” cuando afición y equipo hacen conexión).
Queda un encuentro más frente al equipo de Grecia; cancha difícil y un equipo que, aunque no se juega nada, va a plantear un partido complicado, recordemos que los griegos fueron una de las escuadras que venció al Saprissa en la primera vuelta. Desde esta columna me quiero alejar de la polémica sobre si Alajuelense pondrá un equipo alternativo o no frente a la AD San Carlos; la honestidad de nuestros equipos no debe ponerse en entredicho; no me cabe la menor duda que los erizos sin importar la oncena que saquen el día de hoy saldrán a hacer su partido y buscarán la victoria frente a los norteños. El Saprissa nunca debería depender de terceros para alcanzar sus objetivos; esta experiencia debería servirle de referencia a su dirigencia para no volver a verse en un trance similar a este.
Desde esta columna quiero mencionar el buen trabajo de Jeaustin Campos; tomó un equipo que estaba muerto deportivamente, aunque tuvo un inicio tortuoso, finalmente con trabajo honesto fue capaz de revertir la situación y competitivamente el equipo vuelve a ser fuerte; en las primeras dieciséis jornadas se cosecharon 16 puntos y en las últimas cinco fechas se han conseguido 15 puntos. El estratega más laureado de la institución morada ha provisto al equipo de una identidad de juego y precisamente el día de ayer fue capaz de hacer los ajustes necesarios para ganar el encuentro; una verdadera pena que se perdiera tanto tiempo con el español Iñaki Alonso al frente de la institución (un profesional en toda regla pero que nunca tomó el pulso correcto).
El próximo domingo hay que ir a muerte por esos tres puntos, si el equipo morado logra conseguir la clasificación se volvería un serio candidato al título, el envión anímico de colarse en dicha instancia después de todo el calvario del semestre haría muy fuerte al Saprissa de cara a las llaves de la segunda ronda. El análisis de que se hizo mal en el torneo debe realizarse independientemente de lo que suceda, sin embargo, toda la energía actualmente debe estar enfocada en sacar esta última tarea y esperar que los resultados de terceros equipos favorezcan a los morados en un cierre no apto para cardíacos.
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