El Barça pierde por sanción a Piqué, además del lesionado de larga duración como es Rafinha, pero la lista de bajas del Arsenal lo debilita aún más, después del resultado de la ida.
El conjunto azulgrana, el vigente campeón de la Champions, afronta esta eliminatoria en clara superioridad respecto de su rival, y tras una trayectoria imparable de 37 partidos seguidos sin perder, además del 0-2 de la ida, para dar el salto por novena vez consecutiva a los cuartos de final.
A todo ello se suma el poderío que siempre ha mostrado el Barcelona contra el Arsenal en la Liga de Campeones (ya lo eliminó en las temporadas 2010 y 2011, además de la final del 2006), donde los azulgrana son un azote para el club de Londres.
Los octavos de final, más que una oportunidad, se pueden convertir en un martirio para un Arsenal que sabe que el partido en el Camp Nou se le va a hacer muy largo, aunque nada está escrito aún, y la opción de entrar por primera vez en los cuartos desde el 2010 también es una posibilidad para los londinenses, aunque remota.
En el Barça el relato es antagónico respecto del Arsenal, pues partido que pasa se va agrandando la leyenda de este equipo azulgrana que la temporada pasada firmó un triplete (Liga, Copa y Liga de Campeones) y que en ésta pretende asentar las bases para repetir hazaña.
Después de 37 partidos sin perder, líder sólido en la Liga, la vuelta de los octavos de la Champions aparece como una nueva oportunidad para enviar un mensaje a Europa que la candidatura para reeditar el título por primera vez desde que se configuró la Liga de Campeones cobra cuerpo.
En el césped, el entrenador Luis Enrique Martínez sólo tendrá la baja por sanción de Gerard Piqué, mientras que podrá utilizar al turco Arda Turan, que ya ha cumplido el castigo que arrastraba desde su etapa en el Atlético de Madrid.
Dada esta baja importante en el eje de la defensa, el francés Jérémy Mathieu aparece como la opción más lógica para acompañar al argentino Javier Mascherano para armar el Barça desde atrás.
Adelante, y después de las apuestas por dar minutos a muchos jugadores, la presencia de los titulares parece la carta más normal para un partido de esta altura, con un trío medular formado por Rakitic, Busquets e Iniesta, y con el tridente delante que, liderado por Messi, volverá al once inicial después de que Suárez descansase en el partido del sábado (Getafe) y Neymar por sanción el anterior (Eibar).
Hasta la fecha, el trío atacante lleva 103 goles esta temporada.
Por su parte, el Arsenal llega a la Ciudad Condal con mucho que ganar y poco que perder, apurando sus últimos cartuchos para salvar una temporada hasta ahora decepcionante.
Los 'Gunners', con la duda hasta última hora del defensa Laurent Koscielny y las bajas seguras de Petr Cech, Aaron Ramsey, Santi Cazorla, Jack Wilshere y Alex Oxlade-Chamberlain, confían en dar la sorpresa en el Camp Nou para no caer eliminados por sexto año consecutivo en la ronda de octavos.
"Queremos hacer que lo imposible sea posible. Sabemos que jugamos contra un equipo de mucha calidad, pero es importante que estemos concentrados y respondamos bien", dijo Arsene Wenger, entrenador del Arsenal.
Wenger afronta sus momentos más duros desde que llegó al conjunto del norte de la capital británica hace 20 años, con su equipo a ocho puntos del líder en la Premier League (Leicester City), eliminado de la Copa de Inglaterra a manos del modesto Watford y con pie y medio fuera de la Liga de Campeones.
El Arsenal ha demostrado que, si tiene el día, puede ganar a los 'grandes', y espera que mañana, bajo el batuta de Özil y del exazulgrana Alexis Sánchez, pueda dar la campanada en el Camp Nou y hacerse importante en Europa de nuevo.
