Lewis Hamilton se llevó la pole position del Gran Premio de Qatar con una paliza a Max Verstappen, lo cual ha despertado preocupación en Red Bull, que ha presentado problemas con sus dos autos.
El mexicano Checo Pérez no pudo pasar a la Q3 y largará desde el undécimo cajón, lo cual representan malas noticias para la competencia de constructores, mientras que Verstappen quedó “lejos” de los tiempos del británico, pese a que largará segundo.
Ambos autos tuvieron problemas con el alerón trasero desde las prácticas libres y aunque los ingenieros pongan los dos autos a punto hay algo que asusta a Red Bull: Lewis Hamilton corrió con el motor viejo, de modo que tiene el motor nuevo fresco para las últimas carreras de la temporada.
Helmut Marko, asesor de Red Bull, aceptó que la situación es alarmante, pues si Hamilton dio cátedra con el motor viejo, con el nuevo las cosas no pintan bien para el equipo y en espacial con Verstappen, que tiene una diferencia de 14 puntos a favor, respecto a Hamilton en la clasificación de pilotos.
“El déficit es un poco alarmante. Veamos a qué ritmo puede conducir Lewis. Será una carrera difícil y dura”, mencionó Marko, de acuerdo con Racing News.
Ante esta situación, Red Bull apuesta a lo que pueda hacer Max Verstappen desde la estrategia del equipo y el rendimiento que pueda lograr en las primeras vueltas, en las cuales los autos son más pesados debido a que inician con el depósito de combustible lleno.
“Seguimos siendo positivos. Normalmente lo hacemos mucho mejor con el tanque lleno, así que espero que podamos hacer una carrera emocionante”, dijo.