Ashleigh Barty, número uno indiscutida del tenis femenino, se convirtió este sábado en la primera local en ganar el Australian Open en 44 años, luego de vencer en la final a la estadounidense Danielle Collins (27º) por 6-3 y 7-6 (2).
Barty, de 25 años, que tenía como mejor producción en el torneo las semifinales de 2020, cumplió su propio sueño y el deseo del público que asistió al Rod Laver Arena para celebrar la consagración de una jugadora local, algo que no ocurría desde 1978 cuando Chis O'Neil se impuso sobre la estadounidense Betsy Nagelsen.
La tenista oriunda de la ciudad de Ipswich confirmó a lo largo de dos semanas su favoritismo en Melbourne y sumó su tercer título de Grand Slam después de Roland Garros 2019 y Wimbledon 2021.
"Como australiana, lo más importante es poder compartir esto con ustedes. Se me hizo realidad el sueño, estoy muy orgullosa. Soy muy afortunada de la gente que tengo a mi alrededor, he recibido mucho respaldo de mi equipo durante toda mi carrera. Nunca cambiaron y siempre estuvieron a mi lado", expresó Barty en el court central, luego de recibir la copa de manos de una leyenda del tenis oceánico: Evonne Goolagong Cawley, campeona del Australian Open en 1974, 1975, 1976 y 1977.
La campeona fue reconocida por su juego y su humildad por la estadounidense Collins, de 28 años, que se emocionó hasta las lágrimas luego de disputar su primera final de Grand Slam, situación que la convertirá en "top ten" por primera vez en su carrera a partir del lunes próximo.