La leyenda del atletismo estadounidense, Michael Johnson, dice que aunque el jamaiquino Usain Bolt podría ser considerado el "mejor" velocista del mundo, su favorito personal sigue siendo Jesse Owens.
"Para mí Jesse Owens es el más grande de todos los tiempos y luego situaría a Bolt conmigo en tercer lugar. A Lewis lo pongo detrás como velocista pero también es verdad que se trata del mejor saltador de longitud de la historia", dijo Johnson en una entrevista a Diario Marca de España.
Michael fue cuádruple oro olímpico y ocho veces campeón del mundo. Actualmente tiene 56 años de edad.
Aquí parte de la entrevista a Marca
Más de 20 años después de su retirada, se sigue hablando de su peculiar forma de correr. ¿Es algo que le guste?
Es lo que soy. La gente aún me dice que mi forma de correr era hermosa y que era una de las cosas que me hizo único, pero también es una de las cosas que me hizo rápido y la primera parte no es tan importante como la segunda. Mi estilo, en definitiva, era eficaz porque me permitía producir más fuerza en el suelo que otros velocistas.
¿Ve a algún atleta hoy en día con un estilo similar al suyo?
Cada atleta tiene su propio estilo pero en la mayoría de los casos, al menos a simple vista, no se puede apreciar la diferencia entre ellos. Mi estilo, en cambio, era muy diferente al de cualquier otro velocista y se podía ver fácilmente.
En 2001, el año de su retirada, usted dijo que había logrado todo lo que quería en la pista, "pero no he logrado lo que quiero en la vida". ¿Lo ha conseguido ya?
Probablemente soy una de esas personas que nunca están satisfechas. Siempre me esfuerzo por conseguir más. Es lo que me motiva. Siempre me han impulsado mis objetivos. Durante mi carrera deportiva, pude cumplir todos y cada uno de los objetivos que me había marcado y cuando me retiré, me convertí en empresario y empecé a cumplir otros objetivos, como trabajar en televisión. Luego quise ser un comentarista galardonado y también lo he conseguido, así que siempre estoy buscando el siguiente reto. Pero estoy contento con todo lo que he conseguido. Y si no hago nada más en mi vida, creo que podría estar satisfecho. Pero normalmente surge algo que me emociona, un proyecto que me entusiasma.
He leído que dijo que su derrame cerebral "fue la batalla más grande" de su vida y "mucho más importante que cualquier medalla de oro". ¿Cómo recuerda ese momento y todo el periodo de recuperación?
Estaba en muy buena forma cuando tuve el ictus -septiembre de 2018-, así que nunca esperas que te pase algo así. Y sí, la recuperación de un derrame cerebral es muy, muy difícil. En mi caso, tuve la suerte de haber sido un deportista profesional, de tener la mentalidad que me permitió centrarme en la recuperación del mismo modo que lo hice como atleta. La diferencia es que ganar medallas de oro es un reto que eliges mientras que la recuperación de un derrame cerebral y tener que aprender a caminar y estar de pie de nuevo no lo es, así que la motivación es diferente y hay que entenderlo y afrontarlo así.
Rafa Nadal siempre dice que no sería tan buen si no hubiera competido contra Roger Federer y Novak Djokovic. ¿Qué hubiera logrado usted con un rival a su altura?
Es difícil de decir. Afortunadamente para Rafa, tenía a Djokovic y a Federer, algunos de los mejores de todos los tiempos compitiendo a la vez. Creo que tuve un poco de eso en los 400 metros con Butch Reynolds -plusmarquista mundial antes que él-, Quincy Watts y Steve Lewis, algunos de los cuatrocentistas más grandes, pero no tanto en los 200. Mi objetivo en esta prueba era correr tan rápido como pudiera en lugar de, ya sabes, correr contra los demás. Esa fue la razón por la que logré batir el récord mundial de los 200 metros por un margen tan amplio -en 1996 mejoró el anterior registro en cuatro décimas-.
Noah Lyles dijo que quería romper el récord del mundo de los 200 metros en Budapest pero no pudo. ¿Cree que puede lograrlo en un futuro?
Los récords siempre son posibles y no veo a nadie más capaz de hacerlo en este momento. En el caso de Noah, le doy un 50% de probabilidades porque es un récord muy difícil. Al resto no le doy más de un 30% pero también es verdad que hay que esperar a ver cómo evoluciona Erriyon Knighton.
Usted dice que Jesse Owens es el mejor atleta y velocista de la historia. ¿En qué puesto están Carl Lewis, Usain Bolt y usted?
Sí, es cierto. Para mí Jesse Owens es el más grande de todos los tiempos y luego situaría a Bolt conmigo en tercer lugar. A Lewis lo pongo detrás como velocista pero también es verdad que se trata del mejor saltador de longitud de la historia.
¿Piensa usted que el doblete 200-400 es más meritorio y difícil que el 100-200?
Creo que no cabe ninguna duda -Johnson es el único campeón olímpico de 200 y 400 metros en un mismo Juegos- porque es un logro mucho más raro. Se trata de pruebas muy diferentes mientras que el 100 y el 200 son más similares.
Usted ha sido crítico con World Athletics en los últimos años. ¿Qué necesita el atletismo en estos momentos?
Creo que World Athletics ha hecho un buen trabajo en algunas áreas, como la lucha contra el dopaje, pero no tan bueno en otras. Cuando se trata de promocionar el atletismo para que siga creciendo en popularidad y continúe siendo un deporte de primer nivel, eso ha sido una decepción en los últimos años, ya que sigue decayendo. Creo que los atletas están muy frustrados, y con razón, porque la gente de todo el mundo debería conocerlos, pero son unos grandes desconocidos en comparación con los atletas de otros deportes profesionales. Además, en comparación, las estrellas del atletismo de todo el mundo eran más conocidas en mi época.
Usted cobraba 100.000 dólares por carrera y en 1997 firmó un acuerdo de seis años con Nike de 12 millones de dólares. Hoy en día, los atletas mejor pagados son los maratonianos. ¿Qué piensa al respecto?
No sé cuánto ganan los corredores de maratón en comparación con otros atletas pero lo que es seguro es que los mejores del mundo en 100, 200 y 400 metros deberían ganar tres o cuatro veces lo que yo ganaba. Sin embargo están cobrando bastante menos y eso es lamentable.