Novak Djokovic estaba caliente en un día complicado por el viento y la resistencia de Alejandro Davidovich. Tras ganar el segundo set, adelantarse 7-6 (4), 7-6 (5), explotó.
Había salvado bola de set antes de llegar al segundo 'tiebreak'. Enloqueció en la celebración saltando y sacando el puño. Escuchó algunos silbidos y abucheos de parte de los aficionados de la central, y no se quedó quieto.
Pidió tiempo médico para recibir masajes en el cuádriceps del muslo izquierdo, y de nuevo algunos silbidos del respetable. Se enfadó Djokovic, que aplaudió sarcástico, como también levantó el pulgar mientras cabeceaba de incredulidad. Incluso invitaba con la mano a que la gente incrementara sus reproches.
Más abucheos. No generales, de algunos. Pero Djokovic respondió con victoria, pleno de adrenalina en el partido de tercera ronda.
Tras un partido de tres horas y 36 minutos, Nole habló sobre como la gente le ha llevado la contra durante el torneo.
“La mayoría de la gente viene a disfrutar del tenis o para apoyar a uno u otro jugador. Pero son individuos. Hay personas, hay grupos o lo que sea, a los que les encanta abuchear cada cosa que haces. Eso es algo que me parece una falta de respeto y, francamente, no lo entiendo”, dijo Djokovic más tarde en su conferencia de prensa. “Pero es su derecho. Ellos pagaron el boleto. Ellos pueden hacer lo que quieran", declaró Djokovic.
“A veces, ya sabes, me quedo callado. No 'a veces'; en realidad, el 99% del tiempo, me quedaré callado”, dijo el serbio, quien ganó el Abierto de Francia en 2016 y 2021 y, además de buscar un campeonato importante número 23 para romper su empate con Rafael Nadal, puede convertirse en el primer hombre con al menos tres trofeos en cada Grand Slam. “A veces me opongo a eso, porque siento que cuando alguien es irrespetuoso, él o ella merece tener una respuesta a eso. De eso se trata todo”, sentenció uno de los mejores tenistas de la historia.
