El siguiente video muestra la locura de un jugador de rugby juvenil del club francés Saint-Esteve. Después ver la tarjeta roja ante el club Toulouse, el jugador enfureció y le pegó un tremendo golpe al árbitro Benjamin Casty.
Inmediatamente saltaron los jugadores del Toulouse, que se le fueron encima al agresor. Terminó todo en una verdadera batalla campal.
El árbitro tuvo que ser trasladado a una clínica por las heridas en la mandíbula y en el pómulo.
El presidente de la Liga Francesa de Rugby, Marc Palanques, condenó este incidente y los medios aseguran que podrían sancionar de por vida al jugador.
