El suizo Stan Wawrinka dio este domingo una sorpresa mayúscula al alzarse con el título de Roland Garros, el segundo Grand Slam de su carrera, tras derrotar en la final al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, por 4-6, 6-4, 6-3 y 6-4 en 3 horas y 12 minutos.
El balcánico, gran favorito para lograr el último grande que falta en su colección, sufrió la tercera derrota de la temporada y rompió una racha de 28 triunfos consecutivos.
"Jugué un partido increíble"
El flamante campeón de Roland Garros, el suizo Stanislas Wawrinka, se mostró exultante tras derrotar al número uno del mundo, Novak Djokovic, en la final del Abierto francés este domingo, un duelo en el que confesó desplegó un tenis "increíble".
"No fue fácil, pero supe hacer lo que tenía que hacer, jugar más agresivo y poco a poco fui el jugador que estaba dentro de la pista. Todavía estoy sorprendido por la manera en que jugué. Jugué un partido increíble. Estaba nervioso pero pude encontrar el golpe adecuado", señaló.
El suizo, que conquistó por primera vez el segundo 'grande' de la temporada, no entró a comparar su emoción por triunfar en París y lo que sintió cuando ganó en Australia el año pasado. "Simplemente es diferente no comparo uno con otro. Es muy especial jugando la final contra el número uno del mundo y además por la manera en que he jugado. Fue muy especial", explicó.
"Jugué el partido de mi vida, es difícil de creer. Jugar contra Novak fue uno de mis mayores retos. Sé lo mucho que quería este Roland Garros", añadió un Wawrinka que sorprendió a Djokovic en la final del Abierto galo, impidiendo al número uno del mundo completar el 'Grand Slam'.