A días -o tal vez horas- de que se oficialice el fichaje de Keylor Navas en el Gremio de Porto Alegre, el máximo estandarte del fútbol costarricense estaría poniéndole punto final a su paso por el fútbol europeo, donde estuvo los últimos 14 años. Es por eso que hoy quise compartir con el estimable lector de everardoherrera.com el recuerdo de uno de los muchos éxitos que cosechó el guardameta nacional con el Real Madrid…
Si bien todos saben de la participación del exsaprissista en las tres Champions League que el cuadro de Chamartín obtuvo de forma consecutiva, no muchos conocen el dato de que con el afamado equipo, Keylor jugó una única final contra el FC Barcelona. ¡Y Navas y compañía salieron victoriosos!
Históricamente el derby español ha revestido muchísima importancia. No es un partido cualquiera, y eso lo han sabido sus futbolistas incluso desde que empezaron a formarse en divisiones inferiores de sendos clubes. Complementariamente, existe un viejo adagio que sostiene que “las finales no se juegan, se ganan”. En síntesis: no se puede perder un título contra el odiado rival.
Con respecto a los legionarios costarricenses, es necesario aclarar que aunque Alejandro Morera Soto jugó 28 meses al servicio del Barça, tiempo en el que vio acción en tres clásicos contra el Real Madrid, nunca tuvo la oportunidad de disputar alguna final contra el conjunto capitalino. De tal forma, la Supercopa de España de 2017 tendría un sabor especial para nuestro país, pues por primera vez un hijo de nuestra tierra veía acción en el encuentro de mayor trascendencia de aquella nación, con un cetro en juego.
El Real Madrid, entonces bicampeón europeo, se presentó como campeón de liga 16-17; valga destacar, además, el triunfalismo que ostentaba, pues cinco días antes en Macedonia le había ganado la Supercopa de Europa al Manchester United. Al frente estaba el Barcelona, que venía de alzarse con la Copa del Rey de ese mismo año. Asimismo, la gran final, pactada a dos encuentros de visita recíproca, daba cabida a un desigual duelo de técnicos, pues por un lado estaba el consolidado francés Zinedine Zidane al frente del monarca liguero, y por el otro, el cacereño Ernesto Valverde, quien dirigía su primer partido oficial como timonel de los culés.
Galácticos de turquesa en el Camp Nou. El Real Madrid posa para las cámaras instantes antes de iniciar la disputa por la Supercopa de España 2017. Aparecen arriba, en el orden usual, Navas, Ramos, Kroos, Casemiro, Benzema y Varane. Abajo, Bale, Marcelo, Carvajal, Kovacic e Isco.
El 13 de agosto de 2017 se disputó el juego de ida en el Camp Nou de Barcelona. El nombre de Keylor Navas fue parte de una lista de 36 jugadores a disposición, entre los que destacaban figurones madridistas del calibre de los españoles Carvajal, Sergio Ramos, Isco, Marco Asensio, Nacho y Lucas Vázquez, el portugués Cristiano Ronaldo, los brasileños Marcelo y Casemiro, el alemán Toni Kroos, los franceses Rapha Varane, Karim Benzema y Theo Hernández, el croata Mateo Kovacic y el galés Gareth Bale; mientras que con los locales estaban los ibéricos Gerard Piqué, Jordi Alba, Sergio Busquets, Andrés Iniesta, Sergi Roberto y Gerard Deulofeu, el germano Marc ter Stegen, los argentinos Lio Messi y Javier Mascherano, el croata Ivan Rakitic, los galos Samuel Umtiti y Lucas Digne, el charrúa Luis Suárez y el neerlandés Jasper Cillisen.
Tal vez las nuevas generaciones lo ignoren -desafortunadamente es común caer en la errónea idea de que todo siempre ha sido como lo es hoy-, pero hace más de tres décadas la única forma de poder apreciar un partido en el que coincidieran tantos jugadorazos internacionales era cuando se organizaba un juego de estrellas mundiales… América versus Europa, por ejemplo, y ni qué decir de lo impensable que era aspirar a poder ver un compatriota en un juego de tal magnitud.
De lleno en la final entre merengues y blaugranas, el Real Madrid dio un golpe de autoridad al vencer 3-1 en el propio terreno catalán. Navas estuvo seguro en su meta, y fue vencido por Messi desde los once pasos, previo piscinazo de Luis Suárez cuando el tico se lanzó a sus pies en una acción de apremio. "El Barcelona (que caía por la mínima) llegó vivo a la jugada de Suárez ante Navas, que no tocó al uruguayo", reconoció en su crónica Mundo Deportivo de Barcelona.
Ni lo tocó. Keylor se la rifa ante Luis Suárez, este finge una falta del tico y el árbitro bilbaíno Ricardo de Burgos se la compraría y sancionaría penal para el Barça.
Tres días después el Santiago Bernabéu albergó el encuentro de vuelta, donde el bicampeón de Europa se puso arriba 2-0 antes de concluir la primera mitad. Al manejar una cómoda ventaja, el Madrid bajó las revoluciones y se dedicó a administrar el juego, lo cual impulsó al Barça a cerrar la serie con dignidad, atacando y creando incluso más opciones de gol que en el anterior partido en casa. En todas ellas respondió Keylor, quien además topó con suerte, pues sendos remates de Messi y Luis Suárez se estrellaron en los postes; "portero sin suerte no es portero", reza el refrán que todo futbolero conoce… Pasaron los minutos y el 2-0 no se movió. Navas y el Real Madrid se consagraron campeones de la Supercopa de España, en detrimento de su archirrival.
Entre los detalles anecdóticos que arrojó esa final de hace siete años, además del hecho de que el marcador global correspondió a un inobjetable 5-1, hay que señalar que en el cotejo de vuelta el Madrid dejó su portería invicta tras 24 clásicos en que no lo lograba. Asimismo, alcanzó un 53% de posesión de balón, rompiendo así con los anteriores nueve años en que en 31 derbis siempre había sido el Barcelona el cuadro que se adueñaba del esférico cuando se medía a su mayor oponente. La última vez había sido en mayo de 2008, cuando Keylor Navas acababa de disputar con Saprissa la final de la Concachampions y entonces se preparaba para dirimir las semifinales del Torneo de Verano contra el Brujas de Escazú… ¡De verdad que había pasado tiempo!
Tico en portadas de España. Keylor Navas, con vistoso uniforme amarillo, apareció en las fotos de portada de los diarios españoles As de Madrid y Mundo Deportivo de Barcelona cuando el Real Madrid se adjudicó la Supercopa de 2017.
Hasta la fecha, aquella definición en que Navas salió airoso sigue siendo la última disputada en territorio hispánico por los dos clubes más afamados de España. Ahora el nacional estará iniciando una nueva aventura en Brasil, pero tanto él como nosotros los ticos siempre recordaremos aquella final en que se impuso al Barcelona. ¡Pura vida!
* El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.