El reciente acuerdo de cesión a préstamo del jugador saprissista Warren Madrigal a la organización del Valencia CF ha generado todo un debate en nuestro medio, debido a que el futbolista josefino estará vinculándose al Valencia Mestalla, cuadro reservista que actúa en la 'Segunda Federación', la cuarta categoría del circuito de ascenso en España.
Si bien debemos aceptar que se trata de una joven figura proveniente de un país limitado en el plano internacional como lo es Costa Rica, al mismo tiempo no se puede obviar el hecho de que a sus apenas 20 años de edad ya suma cuatro en la máxima división nacional, además de que contabiliza 15 juegos clase A con la selección mayor tica, en cuenta su última participación en la Copa América EEUU 2024.
En todo caso, Madrigal tendrá un año para demostrar sus condiciones y convencer a la dirección técnica del primer equipo valencianista para que eventualmente sea ascendido al plantel que actúa en la prestigiosa 'Liga de las estrellas'. El éxito que pueda hallar en su primera aventura en el balompié del extranjero le sería de mucho provecho tanto a él como a las arcas del Deportivo Saprissa, así como al combinado tricolor, en el entendido de que un nivel superior en su juego le aportará mucho a 'la Sele' en sus próximos objetivos, el primordial: la clasificación y consecuente participación en la Copa del Mundo Norteamérica 2026.
Casos como el de Warren Madrigal no son nuevos en la historia de los 'legionarios' ticos; de hecho, desde hace más de un siglo ha habido hijos de nuestra tierra vinculados a equipos que han funcionado como filiales de instituciones españolas. En las siguientes líneas el estimable lector de everardoherrera.com conocerá sus historias, los esfuerzos de costarricenses que intentaron darlo todo siempre con la firme intención de algún día ser tomados en cuenta por el cuadro principal en una nación futbolera de orden mundial como España.
El registro más antiguo corresponde a Pedro Quirce, una figura de suma trascendencia para los inicios de nuestro balompié federado. De origen catalán pero criado en tierras ticas -donde fueron sus primeros acercamientos al fútbol-, Quirce regresó a 'la Ciudad Condal' para cumplir sus estudios colegiales, al tiempo que ingresó en las divisiones inferiores del FC Barcelona. Con los blaugranas fue ascendiendo categorías hasta que en 1916 se sumó a la reserva del Barça, o "Equipo B" como se le conocía en aquellos tiempos.
Pedro Quirce, quien luego haría importantes aportes a nuestro país como futbolista, árbitro y dirigente, ha sido objeto de un error por parte de los historiadores nacionales -incluso los más afamados-, pues durante décadas han estado reproduciendo el dato erróneo de que en una oportunidad jugó para el primer equipo del FC Barcelona. Eso es falso; lamentablemente Quirce nunca logró ser ascendido.
En Costa Rica es conocido que Danilo Montero probó fortuna con el Sevilla en 1962. Lo que muchos desconocen es que días después de arribar a tierras andaluzas sufrió una lesión debido a un persistente problema muscular que arrastraba. Una vez recuperado, fue enviado al campo del Estadio Sánchez-Pizjuán para reforzar al Sevilla Atlético en juego amistoso contra el Plus Ultra de Madrid. El Sevilla Atlético era el equipo filial que los ‘nervionenses’ tenían en tercera división, y en esa campaña andaba muy bien; de hecho resultaría campeón y ascendería a segunda. Posterior al duelo frente a los capitalinos, Montero se incorporaría al primer equipo sevillista para un periodo de tres meses de prueba; transcurrido ese tiempo sería descartado.
Dos 'Carasucias' fueron los siguientes costarricenses que tocaron las puertas de una filial española. Juan Carlos Arguedas, y tiempo después Ronald González, intentaron ser fichados en 'la Madre Patria'; ambos probaron suerte con el Real Madrid Deportivo en 1989 y 1990, respectivamente. El club, antes conocido como Castilla (Real Madrid B en otro momento), era la filial de tercera división del poderoso Real Madrid. Se trataba de una escuadra que unos años antes había albergado a los futbolistas Emilio Butragueño, Manuel Sanchís, Miguel González 'Michel', Rafael Martín Vásquez y Miguel Pardeza, la famosísima 'Quinta del Buitre' que le daría tanto prestigio al Madrid de los años ochenta. Al final Ronald y Juan Carlos no fueron fichados por la filial madridista.
El Albacete Balompié es un equipo muy conocido por los ticos, pues por sus filas pasaron los guardametas Luis Gabelo Conejo y Keylor Navas. Y en 2010, justo cuando allá se abría camino el futuro ganador de tres Champions League, arribó otro arquero tico. Mauricio Vargas, posterior mundialista sub-20 en Colombia 2011 y hermano del actual zaguero de 'la Sele' y del Millonarios cafetero, Juan Pablo Vargas, se incorporó a la categoría juvenil manchega. Allá permaneció año y medio; en la primera temporada alternó entrenamientos con el conjunto de reserva, el Atlético Albacete que militaba en cuarta división, mientras que para la siguiente Mau se incorporó de lleno al "Alba B", pero en la dirección técnica hubo un cambio de timón que lo terminaría afectando. Desafortunadamente para sus intereses, el nuevo estratega relegó al costarricense, quien a inicios de 2012 decidió dejar las filas albaceteñas y se marchó al fútbol universitario de Estados Unidos, para más adelante regresar a nuestro país y jugar en la primera categoría nacional.
El siguiente tico enrolado en un club franquicia español fue Diego Estrada. Producto de su gran participación en el Mundial sub-20 Egipto 2009, el fino creativo alajuelense empezó a ser codiciado por varios clubes de Europa, hasta que a inicios de 2011 se incorporó al Real Zaragoza. Como 'los Maños' tenían completo su cupo de futbolistas extracomunitarios, fue enviado al equipo reservista, el Zaragoza B, que militaba en la tercera división española y era dirigido por el argentino Juan Eduardo Esnáider, exjugador del Real Madrid y 'la Juve'. La idea era que Estrada se mostrara en 'la categoría de bronce' para posteriormente recibir una oportunidad en el primer equipo zaragocista, mas esto último no ocurrió, y antes de concluir la campaña 2011-2012 fue cedido a préstamo al Comunicaciones chapín, donde aguardaba por él Ronald González, técnico 'crema' y su estratega en la juvenil tica en el mundial egipcio.
Un actual futbolista del Puntarenas FC también fue parte de una filial en el balompié ibérico. Keven Alemán, mediocampista josefino de origen canadiense, mostraba un enorme nivel en sus inicios como futbolista profesional. Tras ver acción con 'los de la hoja de maple' en el mundial infantil México 2011, pasó a mediados de ese año del Toronto FC Academy al Real Valladolid CF, en el que constituyó entonces el segundo fichaje de un jugador canadiense por un club de la primera categoría española.
Dada su joven edad (17 años), el cuadro pucela se preocupó porque Alemán experimentara un gradual desarrollo desde las inferiores; así, pasó por dos divisiones juveniles hasta que en 2013 se sumó al Real Valladolid B, que participaba en la cuarta categoría. Con este elenco de reserva jugó irregularmente un año, tiempo en el que su escuadra logró el ascenso a tercera. Posteriormente decidió cambiar de aires, basando su decisión final quizás en el hecho de que el primer equipo del Valladolid descendió a segundas al final de aquella misma temporada. Su siguiente equipo fue el CS Herediano, que le dio su primera oportunidad en el fútbol nacional.
Un cancerbero cierra el listado de 'legionarios' costarricenses en filiales españolas, y no es otro que el actual guardameta de la selección nacional, con brillante actuación en la última Copa América. En 2020 Patrick Sequeira tenía tres años de haber dejado a Saprissa para tratar de hacerse un nombre en España; en ese momento parecía que había llegado el punto culminante de su prometedora carrera, pues fue solicitado a préstamo por el Real Celta de Vigo.
El cuadro celtista ubicó a Sequeira en su segunda representación, el Celta B que se movía en la Segunda B (tercera división). Allí jugó el limonense durante siete meses, hasta que el primer equipo lo convocó al plantel principal, dirigido por el argentino Eduardo 'Chacho' Coudet y que contaba con los jugadores españoles Iago Aspas y Nolito, el mexicano Néstor Araújo y el peruano Renato Tapia. Sin embargo, su participación en la 'Liga de las estrellas' se limitó a 12 partidos en los que permaneció en el banquillo de suplentes, en cuenta los encuentros frente al Real Madrid en Balaídos, y contra el Barcelona en el Camp Nou. Concluida la campaña 2020-2021 el nacional retornaría al Real Unión de Irún, su equipo antes de ser prestado al Celta.
Ocho casos, ocho historias distintas pero con el mismo desafortunado desenlace: ninguno logró ser ascendido y consolidarse en el primer equipo. El que más cerca estuvo de lograrlo fue Patrick Sequeira, quien hoy es jugador de la máxima categoría portuguesa y parece que su carrera por fin estará despegando; eso sí, debió acudir a otra vía para lograrlo, como lo fue el mostrarse hace cinco semanas en el histórico empate a cero ante Brasil en Los Ángeles. A Warren Madrigal, por su parte, le tocará cambiar la historia… ¡Que así sea!
*Nota del redactor: el caso de Pedro Quirce difiere de todos los demás, por cuanto en 1916 su equipo "Barcelona B" no jugaba como filial en ninguna categoría del ascenso español. Sin embargo, la escuadra estaba conformada por la reserva de la institución blaugrana, de manera que todos sus componentes actuaban con el principal objetivo de convencer y recibir un eventual llamado al primer equipo, exactamente como sucedía con los otros casos descritos de clubes franquicias; es por tal razón que el caso de Quirce se incluye en el presente artículo.
**El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.