“ICODER BAJO SOSPECHA”
“Es como poner al gato a cuidar la leche” (JLHF)
“Toda escoba nueva barre bien”, dice el adagio. Tremenda bronca se va a encontrar el Ministro del Deporte y la Recreación (Hernán Solano), apenas aparque su carro en el Estadio Nacional e ingrese al despacho.
No ha iniciado y ya tiene sobre la mesa el expediente de quien fue nadador “Máster”, Jonatan Mauri. La presión nacional es enorme y hay muchas circunstancias que aclarar. Todo señala que a quien se le entregó el premio no reunía los méritos suficientes, excepto ser hermano de la anterior Ministra.
Es obvio que hay que ser un super-deportista, que enorgullezca a todo un país y reciba, a cambio, el millonario reconocimiento. Recapitulando. En los últimos años contados son los deportistas que han realizado gestas. Y a pesar de ello, un largo y laborioso tramite terminó por premiar a quienes habían tenido actuaciones de relieve. Son los casos de las hermanas Poll, Hanna Gabriels, Nery Brenes, Andrey Amador o Keylor Navas. Y a pesar de ser incuestionable su labor deportiva, a algunos les costó un mundo y un largo camino burocrático. Pero en el caso de Jonathan Mauri, pareciera que sus gestiones fueron por otros derroteros. A final de cuentas se informa que dicho Premio terminó en el 2010, por falta de recursos económicos. Por otra parte, no han tardado en salir a la luz pública miembros que integraban el Comité de Premiación, ignorando en qué sesión se decidió que el nadador debía ser postulado por sus logros, mucho menos haber sido elegido como merecedor del premio.
Y transciende que “el Master” acudió a los Tribunales de Justicia y que el ICODER no aportó argumentos como gestión de defensa, permitiendo que el proceso judicial siguiera y se decantara a favor del deportista. Lo que sí está claro, sorprende e indigna, al margen de proceso por el cual se le entregó el millonario premio, es la posición e inacción de la institución. Por ello debe ser investigada en todo su proceso e identificar a los funcionarios que, supuestamente, ni aparecieron. Tal parece que alguno no cumplió con su obligación. En todo caso, “no es posible poner al gato a cuidar la leche”. ¿Quizás por órdenes tácitas?