Si de luchar por lo que se quiere y esforzarse se trata, el futbolista generaleño Aaron Navarro debe ser el número 1, y aunque el camino no le ha sido fácil, su dedicación al futbol y no rendirse por sus metas lo han llevado a la Selección Nacional para los amistosos ante Paraguay y Panamá.
Navarro tiene 27 años, es estudiante de contabilidad y oriundo de Palmares de Pérez Zeledón es la gran figura del AS Puma Generaleña y buscará un puesto en el equipo de Paulo Wanchope.
El futbolista contó a www.everardoherrera.com sobre sus inicios en el fútbol, y de lo que fue una de las decisiones más complicadas en su carrera deportiva, que inició en la zona de Pedregoso.
"Comencé en el futbol en Pedregoso, estuve en el Municipal Pérez Zeledón, de ahí pasé al AS Puma donde jugué en segunda división. Gracias a Dios ascendimos a primera. Tuve que dejar de jugar a los 17 años porque tenía que trabajar para entrenar y eso era muy cansado así que lo hice a un lado. Fueron cuatro años alejado del futbol hasta que volví con el proyecto de los Chinchilla. Después de todo esto que lo llamen a la Selección Mayor es todo un honor".
El delantero ha tenido que pasar por circunstancias complicadas para estar allí. Una de ellas es que para ir a los entrenamientos de su equipo debe desplazarse en autobús, algo que muchos no se imaginan.
Sin embargo, todo eso quedó atrás por un momento y confesó que cuando se enteró de su convocatoria a la Sele, sintió una de las alegrías más grandes de su vida y lo cataloga como una bendición y un premio a su trabajo.
"Fue demasiada felicidad. Estaba con mi familia y todos me abrazaron y me felicitaron por el llamado. Mi mamá se puso a llorar porque ella más que nadie sabe lo difícil que ha sido el camino. De solo recordar ese momento se me eriza la piel".
"Es emocionante porque después de verlos por televisión me va a tocar compartir camerino y entrenar con ellos y es algo que lo llena de felicidad".
Navarro tendrá la oportunidad de entrenar y jugar con Keylor Navas, su referente en el futbol. Y como Navas, sabe que él también puede cumplir las metas si se trabaja con humildad.
"Tengo la fe de que me va a ir bien. Intento llevarme bien con todos, me considero una persona humilde y quiero ganarme un puesto en la sele con mi juego y mi forma de ser".
Seguro de sí mismo. Así es Aaron Navarro, de los jugadores que no temen a los nuevos retos y que sin importar los obstáculos del camino, se proponen llegar a lo más alto. El camino de éxitos para este generaleño, apenas comienza.