Este domingo el equipo del Real Madrid levantó un 0-2 en el estadio Santiago Bernabéu y salvó un punto en el minuto 92 con un gran cabezazo de un Militao convertido en delantero centro en los minutos finales.
Nada hacía presagiar que a los blancos les iba a costar tanto ganar el partido. El Real Madrid arrancó mandando y se notó la entrada en el once de varios habituales que descansaron a mitad de semana por la Copa del Rey.
El Madrid convirtió a Édgar Badía en protagonista muy pronto, aunque los 'merengues' también sufrieron las acometidas de un Lucas Boyé que dio sentido en un escenario grande al interés del Barça en hacerse por sus servicios.
Las paradas del meta, iluminado toda la tarde, mantuvieron en el partido a un Elche que fue desesperando al Real Madrid, aunque todo pareció seguir el guion previsto cuando De Burgos Bengoetxea, que tuvo una pésima actuación, pitó un penalti de Palacios a Vinicius tan claro como la falta previa de Kroos a Pere Milla. Se cumplió el dicho de que penalti que no debe ser se termina fallando y Benzema mandó por arriba el que hubiera el penalti 35 seguido sin fallo de los 'merengues'.
Y del penalti fallado a un sorprendente 0-1 que dejó helado al Bernabéu. La puso con enorme clase Fidel, sustituto del lesionado Tete Morente, y remató con aún más categoría Lucas Boyé ante un Alaba que dimitió en la marca.
El gol del Elche, al filo del descanso, hizo despertar a un Real Madrid algo aletargado en el final de los primeros 45 minutos y tanto Mendy como Kroos pudieron empatar en los últimos tres minutos. Ambos se toparon con un Badía que ya no tendría tanto trabajo en la reanudación.
Y del penalti fallado a un sorprendente 0-1 que dejó helado al Bernabéu. La puso con enorme clase Fidel, sustituto del lesionado Tete Morente, y remató con aún más categoría Lucas Boyé ante un Alaba que dimitió en la marca.
El gol del Elche, al filo del descanso, hizo despertar a un Real Madrid algo aletargado en el final de los primeros 45 minutos y tanto Mendy como Kroos pudieron empatar en los últimos tres minutos. Ambos se toparon con un Badía que ya no tendría tanto trabajo en la reanudación.
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Se repite la historia
Los de Ancelotti estuvieron atropellados tras el descanso y solo contaron con el faro de Vinicius, sobre todo tras la salida por lesión de Benzema. De Burgos continuó con su 'show' y pitó un penalti inexistente tras una caída de Hazard que él mismo rectificó tras ver la jugada en el VAR.
Todo eso fue exasperando a un Real Madrid que solo recuperó su resiliencia al final, cuando el Elche ya se había puesto 0-2. Los visitantes se encontraron con el segundo tanto después de otra acción plagada de clase de Lucas Boyé. El argentino puso la calma y la pausa y cedió para Pere Milla, que se redimió de la roja copera y cruzó ante Courtois.
Quedaba algo menos de un cuarto de hora y ese resultado hubiera sido definitivo para cualquier equipo, pero no para uno que ya había visto cómo el Real Madrid le remontaba un 1-0 con uno menos hace apenas tres días. A los de Francisco les temblaron las piernas y repitieron una historia que ya vivieron en el Camp Nou y en el Martínez Valero en Copa en unos últimos diez minutos para olvidar.
Pere Milla neutralizó el 0-2 con un penalti en área propia por mano que esta vez no perdonó Modric y el Elche se metió demasiado atrás para defender un botín que se le escapó en el minuto 92, cuando Militao cabeceó a la red un centro a la desesperada de Vinicius.
Un empate escaso para lo que los de Ancelotti esperaban de este partido, pero notable dada la posición predominante que los blancos tenían y seguirán teniendo tras esta jornada en La Liga. El Real Madrid sigue caminando con paso firme hacia el título tanto por su confianza como por los fallos de unos rivales que no están dando la talla.