A pesar de la mejoría general experimentada en Europa en los últimos meses en relación a la pandemia del COVID-19, las cosas han empezado a empeorar de nuevo en países como Alemania.
Por ello, diversas regiones del país han comenzado a endurecer las restricciones y una de las más afectadas ha sido la Baviera del Bayern de Múnich. Allí, los que no hayan sido vacunados no podrán entrar ni en hoteles ni en restaurantes.
Un problema importante, por tanto, para un Joshua Kimmich que se mostró contrario en varias ocasiones a las vacunas y que, si nada cambia, no podrá concentrarse con el equipo cuando le sea requerido.
Para empezar, el jugador aún no se ha incorporado a los entrenamientos del Bayern de Múnich, algo que sí que han hecho Serge Gnabry y Jamal Musiala, quienes tuvieron que pasar una cuarentena después del positivo de Niklas Süle con la Selección Alemana. Curioso lo de Gnabry, puesto que él tampoco se ha vacunado y tendrá problemas similares de ahora en adelante si no lo hace.
Está por ver qué decide el jugador finalmente, pero la presión sigue siendo grande hacia él por su decisión de no vacunarse y, además, de hacer cierta promoción del asunto. Para empezar, su presencia este viernes ante el Augsburgo está prácticamente descartada.