La Selección de Gales logró una victoria fundamental (2-3) en su camino hacia el Mundial de Catar 2022 gracias a Gareth Bale, que anotó un 'hat trick' para remontar de visita contra Bielorrusia y reencontrarse con su mejor versión.
Bale ha jugado ese partido que todo futbolista desea tener, con tres goles para dar un triunfo vital. Todo lo que tocaba se convertía en oro.
Pronto apareció para estrenar el marcador. Fue en el minuto 6 cuando aprovechó el primer penalti que él mismo generó ante el guardameta Chernik.
693 días después, Bale volvió a marcar con su Selección. No lo hacía desde octubre de 2019, frente a Croacia, pero no le tembló el pulso en ninguna de las dos ocasiones desde los once metros. Gales tenía allanado el camino.
No obstante, se trataba de un partido igualado entre dos selecciones que partían con los mismos puntos (tres), aunque Gales tiene un partido menos disputado. Y Bielorrusia no dio tan fácilmente su brazo a torcer. De hecho, poco a poco fue creciendo.
En el minuto 29, otro penalti absurdo esta vez cometido por Gunter permitió a Bielorrusia gozar de una pena máxima que Lisakovich anotó. Un empate que duró menos de dos minutos: en una contra, el mismo Lisakovich encontró a Sedko para el 2-1 de Bielorrusia.
Ayudó el descanso a Gales para aclarar las ideas y salió mejor en el segundo tiempo, aunque fue con otro penalti algo discutido sobre Ben Davies mediante el cual Bale empató con ese 2-2 que se mantendría hasta el tiempo de añadido.
Llegó mejor Gales al final del encuentro y, tras una parada sensacional de Chernik, la jugada continuó en el 93' y un centro de Daniel James fue conectado de volea a la perfección por Bale, que fue el protagonista absoluto en una cita inolvidable. 2-3 y Catar, más cerca.