La República Checa se encontró con un extraño obstáculo en sus preparativos para los octavos de final de la Eurocopa, al tener que desembarcar de su avión a Budapest después de que su puerta no se pudo cerrar.
Después de haber terminado segundo detrás de Inglaterra en el Grupo D, el equipo checo se enfrentará a Países Bajos en la segunda ronda que se disputará en el Puskas Arena.
Los checos debían entrenar en el campo del estadio nacional húngaro el sábado, pero en cambio se vieron obligados a continuar con sus preparativos en Praga antes de volar por la noche.
La escuadra de República Checa ha estado volando entre partidos en un avión privado este verano, pero estaban en tierra cuando el tobogán inflable de emergencia se desplegó accidentalmente.
''Experimenté retrasos en los vuelos, reubicaciones e incluso cancelaciones debido al coronavirus. Pero no volando debido a un deslizamiento inflado accidentalmente, esta es la primera vez'', escribió el mediocampista Alex Kral en Twitter.
El funcionario del equipo también publicó, diciendo: "La selección checa practicará en Praga contrariamente a los planes originales debido a los problemas técnicos del avión y viajará a Budapest más tarde en la tarde de hoy".
El duelo entre Países Bajos y República Checa se disputará el domingo a las 10 am (Hora de Costa Rica).
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