Alemania planea extender hasta el 14 de marzo las restricciones sanitarias para evitar la propagación del Covid-19, sobre todo ante la preocupación de las nuevas variantes del coronavirus que provoca la enfermedad, según un borrador de acuerdo para las conversaciones entre la canciller Angela Merkel y los dirigentes de los 16 estados federados.
Desde noviembre están cerrados los restaurantes, actividades ociosas y la vida cultural. En diciembre, las autoridades decretaron el cierre del comercio no esencial y las clases presenciales. Inicialmente estas medidas iban a mantenerse hasta principios de enero, pero tras sucesivas prórrogas se estableció que durarían hasta el 14 de febrero.
En Alemania, la incidencia acumulada sigue a la baja y actualmente se sitúa en 68,0 casos por 100.000 habitantes, frente a 82,9 hace una semana, y las nuevas infecciones sumaron en una semana 56.547.
La incidencia cayó el martes en Alemania por primera vez desde hace tres meses por debajo de los 75 nuevos contagios, hasta los 72,8 casos.
El objetivo del Gobierno alemán es lograr bajar la incidencia por debajo de 50 de forma sostenible, nivel que considera necesario para poder volver a rastrear todas las cadenas de contagios.