Un coágulo en su cerebro puso contra las cuerdas al argentino, Diego Armando Maradona, cuando comenzaba el mes de noviembre.
Los médicos detectaron un hematoma subdural por el que tuvo que ser intervenido de urgencia y que le tuvo varios días en el hospital.
Tras más de una semana en la clínica, fue trasladado a una casa en la que estaba recibiendo todo tipo de cuidados y era controlado a diario. Finalmente, este episodio ha acabado trágicamente con su fallecimiento tras sufrir esa parada cardiorespiratoria.
Diario Olé de Argentina hizo un recuento de cómo fueron los ultimos días de vida del ídolo argentino:
El 30 de octubre, el día de su cumpleaños 60, se lo vio muy deteriorado en el Bosque (Estadio de Gimnasia). Como pudo, caminando ayudado por dos personas, acudió a la cancha de Gimnasia en la previa del duelo ante Vélez para ser homenajeado por Chiqui Tapia y Marcelo Tinelli. Recibió los honores y no pudo continuar, por lo que tuvieron que llevarlo de vuelta a su casa. Y el 2 de noviembre fue el puntapié inicial del trágico noviembre de Diego Maradona.
Aquel fatídico lunes de principio de mes nos desayunamos con la noticia de que el Diez había sido traslado a una clínica de La Plata. "Un bajón anímico que afectó su alimentación, pero nada más", resumió su médico de cabecera Leopoldo Luque. Pero el asunto pasó a mayores cuando un día después tuvo que ser trasladado en una ambulancia de Swiss Medical a la Clínica Olivos, donde por la noche se le programó una intervención en la cabeza por un hematoma subdural.
¿Qué le habían diagnosticado? Se trata de una especie de coágulo en la cabeza, producido por una rotura traumática de vasos venosos que atraviesan el espacio subdural. Con términos más científicos, es una acumulación de sangre y de productos de la descomposición de la misma. La sangre se filtra de las venas y crean una bolsa que sobresale y ejerce presión sobre el cerebro. Si la misma es muy grande, puede lesionar o desgarrar el tejido cerebral cercano.
"La cirugía terminó con éxito, duró 80 minutos. El procedimiento transcurrió con total normalidad y sin complicaciones", le informaron a las 22.30 de ese día a Olé, desde el entorno de Maradona.
El 11 de noviembre, y luego de ocho días de internación, Diego recibió el alta y se dirigió a una casa en Nordelta para continuar con la recuperación. Desde ese momento no hubo más noticias acerca de su estado de salud hasta este fatídico día cuando se conoció lo peor. En esa localidad, Maradona sufrió un paro cardíaco y no lo pudieron reanimar. Fue un mes cargado de problemas de salud que terminó de la peor forma.
Fuente: Diario Olé