Chelsea consiguió este miércoles una victoria que le aporta oxígeno, sobre todo luego de tres partidos en los que no había podido superar el empate. El conjunto blue, que en esta jornada se vistió de rosa con detalles azules en su indumentaria, se impuso 4-0 a Krasnodar en su visita a Rusia y despega hacia la cima del Grupo E con 4 unidades cosechadas en dos juegos.
El local intentó sorprender en el inicio del partido con un remate de Daniil Utkin que forzó la estirada de Edouard Mendy. Luego de ello, los de Frank Lampard tomaron las riendas y empezaron a inclinar el campo a su favor.
Fue así cómo Timo Werner generó un penal a los 14' y Jorginho quedó a cargo de la oportunidad de abrir el marcador. Sin embargo, el remate cruzado que el italiano ejecutó con parsimonia vio pegar el balón en el poste, después pegó en la espalda del portero local y luego fue despejado.
Tras un bache pronunciado, el visitante logró hacer daño a su rival con el pase de Kai Havertz que encontró a Callum Hudson-Odoi. El joven inglés disparó bajo y venció al guardameta Matvey Safonov.
Por el quedo del propio Chelsea, el dueño de casa se animó y amagó con poder alcanzar el empate. De todas maneras fue cuestión de tiempo para que los de la Premier League terminaran por provocar el desarme de un endeble oponente.
En los últimos 15' de juego, Werner no perdonó de penal y remató fuerte para sacudir las redes. El marroquí Hakim Ziyech apareció 180 segundos después para celebrar un nuevo tanto y el último llegó a través del desequilibrante estadounidense Christian Pulisic a los 90', para dictar cifras definitivas.
Chelsea suma confianza en la Champions tras el 0-0 como local ante Sevilla y se apodera de la cima. En la próxima jornada, su rival será Rennes sobre suelo británico en Stamford Bridge.
