Ni el más loco de todos los futboleros podía imaginarse a Lionel Messi fuera del Barcelona, salvo que sea bajo la dirección técnica de su amado y admirado Pep Guardiola. Luego de los años dorados del Blaugrana, ambos estuvieron cerca de reencontrarse.
Según Martí Perarnau, biógrafo del director técnico catalán, Messi y Guardiola tuvieron tres acercamientos reales, pero solamente uno fue con seriedad: "Básicamente, ha habido tres momentos en los que se pudo recuperar esa dupla. Uno fue, muy levemente, en 2016, cuando el entorno de Messi se contactó con Guardiola, quien acababa de llegar al Manchester City. Fue un contacto muy leve".
"El segundo gran momento sí se pudo dar, porque Guardiola daba por hecho el reencuentro", continuó Perarnau. "Fue en 2020, después del desastre de la Champions, donde el Barcelona fue aplastado por el Bayern Münich, en cuartos de final y donde el Manchester City fue eliminado por el Lyon, en plena pandemia".
"Messi se acercó a Pep, le dijo que iba a salir del Barcelona, y que iría al City. Se hicieron los planes económicos, aunque a Guardiola le preocupaban más los de juego. Necesitaba saber cómo encajar a Messi que sumaba años, en un estilo de juego tan coral y tan armónico, como el que tiene el Manchester City, donde no hay una gran estrella. Ahí se produjo la historia del burofax, ese pulso entre Messi y el presidente del Barcelona", explicó el periodista.
"Finalmente, no se dio la salida y Messi se quedó un año más", contó el reportero a TNT Sports. "Al año siguiente se marchó al París Saint-Germain, y no hubo acercamiento. Pep ya tenía otras ideas de juego. Organizó mucho más la estructura del equipo, y el posible encaje de un año antes ya no lo veía. Además, a Messi le apetecía mucho más la oferta del París Saint-Germain. En el verano de 2020 pudo darse, pero no sucedió".